El exministro francés Benoît Hamon fue electo hoy como el candidato que representará al Partido Socialista en las elecciones presidenciales que tendrán lugar en abril de este año. Con un 60% de las mesas escrutadas, Hamon se impuso sobre su oponente, el ex Primer Ministro Manuel Valls, con un 58,65 % de los votos. Valls alcanzó el 41,35 %, según los primeros resultados provisionales.
En esta segunda vuelta, según los organizadores del escrutinio, se acercaron a las mesas cerca de 1,1 millones de personas, contra los 4 millones que lo habían hecho en diciembre pasado en las primarias de la derecha.
La de Hamon representa una victoria para el ala más progresista del Partido Socialista y para la facción crítica con el actual presidente, François Hollande. Durante el primer gobierno de Hollande, Hamon asumió el cargo de responsable de Consumo (de 2012 a 2014) y, más tarde, fue nombrado Ministro de Educación, cargo en el que permaneció solamente cuatro meses, de abril a agosto 2014. Su renuncia, según argumentó, se debió a su desacuerdo con las políticas de austeridad llevadas adelante por el Ejecutivo.
En su programa de gobierno se destaca la propuesta -muy criticada por Valls- de una renta universal para los jóvenes mayores de edad, que eventualmente se proyecta que llegue a los 750 euros mensuales. Otras de sus iniciativas que parecen haber seducido a algunos nuevos votantes son la legalización de la marihuana y, también, la modificación del Código Penal para la reducción de algunas penas.
De cara a las presidenciales de abril el candidato y exdirigente de las juventudes socialistas se encuentra en quinto lugar en las encuestas, que están lideradas por la candidata de la ultraderecha Marine Le Pen y el conservador François Fillon. De todos modos, según los sondeos, por el momento, la de Hamon no es la candidatura de izquierda más fuerte: por debajo de Le Pen y Fillon se encuentra el líder de la izquierda radical Jean-Luc Mélenchon.