La mesa nacional de organismos de derechos humanos exigió “que se respete la soberanía del pueblo venezolano en esta hora difícil” a través de un comunicado en el que reclamaron “el pleno acatamiento de los principios del derecho internacional” y el “reconocimiento de las autoridades electas de acuerdo a la Constitución Nacional. La voluntad popular se manifiesta en las urnas, la democracia no funciona por autoproclamación”, remarcaron las Abuelas de Plaza de Mayo y las Madres de la Línea Fundadora, H.I.J.O.S. y Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, entre otras agrupaciones. El CELS, por su parte, abogó por “una salida democrática y pacífica” del conflicto y pidió el rechazo de la comunidad internacional “al intento intervencionista de Estados Unidos”.
“Observamos con preocupación cómo algunos sectores atizan un conflicto que puede tener consecuencias trágicas para toda América latina”, advirtieron los organismos en el texto en el que fijaron postura a raíz de los hechos que sacuden a Venezuela. “La nuestra es una región de paz y no podemos permitirnos, como ciudadanas y ciudadanos de esta Patria Grande, otro enfrentamiento fratricida”, sostuvieron, además, la Comisión Memoria, Verdad y Justicia de Zona Norte, la Liga Argentina por los Derechos del Hombre y la Asociación Buena Memoria entre las otras firmas que acompañaron la postura. Además de hacer hincapié en la necesidad de que en Venezuela se respete la voluntad popular, que en mayo del año pasado reeligió a Nicolás Maduro como presidente, consideraron “inaceptable” cualquier injerencia extranjera en la vida institucional de ese país, “de allí la responsabilidad que cabe a funcionarios, dirigentes y medios de comunicación a la hora de informar y opinar al respecto”.
Los organismos celebraron “el llamamiento conjunto de los gobiernos de Uruguay y México a las partes involucradas, así como el de otros Estados y organismos multilaterales, para desescalar la tensión a través del diálogo y el estricto apego a los derechos humanos”. El comunicado que firmaron al pie ocho organizaciones de derechos humanos concluyó considerando que “ya hemos vivido lo suficiente para saber que el intervencionismo imperialista en cuestiones de política interna de otros países nunca ha conducido a buen puerto, por esto exigimos que se respete la soberanía del pueblo venezolano en esta hora difícil”.
En un comunicado propio, el CELS consideró “necesario que el Estado venezolano garantice la protección de la vida, la vigencia plena de los derechos humanos y el derecho a la protesta, así como la investigación efectiva de las violaciones denunciadas”. Al mismo tiempo, advirtió que “la intervención de Estados Unidos sobre la política regional evoca situaciones que América Latina ya ha atravesado con consecuencias trágicas”. Consideraron “preocupante” que el gobierno argentino avale el rol que Estados Unidos está jugando en la región.
“La amenaza con la intervención militar, la presión sobre asuntos de política interna y la imposición de sanciones económicas que contribuyeron a empeorar la situación socioeconómica muestran que Estados Unidos busca condicionar la vida política de la región”, expresó el CELS, por lo que cerró reclamando el rechazo de parte de gobiernos, organismos multilaterales y de las fuerzas políticas de “cualquier intento de injerencia unilateral o de intervención militar”.
En tanto, desde la Asociación de Ex-Detenidos Desaparecidos, también hicieron llegar su repudio a la “intervención de la OEA y del gobierno norteamericano en los asuntos internos de Venezuela” así como extendieron al “pueblo venezolano” su solidaridad. “Repudiamos enérgicamente también, y una vez más, las declaraciones del presidente argentino Mauricio Macri, que no hacen más que expresar a su gobierno nefasto que sólo trae hambre y represión para nuestro pueblo, y que se unifica con los peores referentes de la derecha y el fascismo que recorren nuestro continente sur”, postularon.