La fiscal de Violencia Institucional, Karina Bartocci, investiga un episodio de barrio Ludueña, en el que la madre de un colectivero denunció que el muchacho fue brutalmente agredido por personal policial, mientras esperaba la hora para ir a trabajar. Según se indicó a este diario desde el Ministerio Público de la Acusación, la funcionaria judicial recibió la denuncia el jueves por la tarde y espera un informe de Asuntos Internos para avanzar con medidas. Todo comenzó cuando los policías vieron a un hombre discutiendo con su pareja, a dos cuadras del pasillo de Matienzo al 500 bis. Al parecer, el hombre se golpeaba la cabeza contra la pared y al ver a un policía salió corriendo hacia adentro del pasillo. El agente pidió refuerzos y cuando llegó personal de la división Motorizada, Jonatan Casco recién entraba a la casa de su madre a dejar la moto y un policía lo tomó el cuello. "¿Dónde está mi compañero?", repetía a los gritos, sin escuchar a la familia que estaba con una beba de 7 meses, de una vecina. "Vivo cerrando la puerta por los ladrones, y ahora también la voy a tener que cerrar por los policías", se quejó Mónica.
Parte de la situación acaecida el martes pasado fue filmada por la mujer, cuando vio que el agente "con los ojos desorbitados" no dejaba de ahorcar a su hijo de 33 años, que entró a trabajar hace menos de un mes como chofer de colectivo. "Él lo empujaba para afuera y me dijo que agarre el teléfono y filme". Los vecinos de la zona fueron testigos de lo ocurrido, que terminó con disparos de "balas de goma y tiros al aire", reza la denuncia. Jonatan y su hermano, que vive enfrente y salió a defenderlo, fueron detenidos en la seccional 12° desde las 10.30 del martes hasta las 21 de ese día. "Me dijeron que si molestaba, me llevaban a mí también", dice la denuncia. "Yo fui enseguida a la seccional para hablar con el comisario que me maltrató, me echó. De ahí me fui a Fiscalía a denunciar lo que paso", dijo ayer a Rosario/12. La mujer se manifestó preocupada por la situación laboral de Jonatan, que tiene un hijo que mantener. "El tiene contrato por tres meses y le costó mucho conseguir este trabajo. Si le forman una causa, no le van a renovar el contrato", lamentó sobre el episodio en el que fue detenido por error.
Según relató la mujer de 58 años, desde que empezó a trabajar, Jonatan va todas las mañanas hasta su casa en moto, la deja allí y sale hacia la punta de línea del 122. Mientras estaba dejando el rodado, su madre vio por la ventana que un policía se acercaba a su casa. Como tenían la puerta entreabierta, el agente entró y agarró del cuello a Jonatan, mientras le gritaba para saber dónde estaba su compañero -el que pidió refuerzos-. Mónica indicó que enseguida apareció una mujer policía, que no detuvo la actitud de su par. Ella les dijo que el otro policía debía estar en la casa de al lado, donde se metió el vecino que discutía con su pareja, pero no la oyeron. "Ese muchacho (por el policía) estaba fuera de sí, yo quería hablar con él y preguntarle que pasaba y estaba sacado, parecía drogado", contó la mamá del joven agredido.
Mónica aseguró a este diario que la familia permanece conmocionada con lo ocurrido, y pidió que el Ministerio de Seguridad tome cartas en el asunto. "Si quieren que la gente crea en la policía, que hagan algo al respecto", reclamó.
En tanto, Jonatan dijo que el agente estaba asfixiándolo y que él lo empezó a empujar. "Lo agarré del brazo y lo empecé a llevar para afuera. En el lugar también había una mujer policía y yo le dije 'mirá cómo me ahorca' y ella me decía que me calme. Me amenazó y me dijo que ya me iba a agarrar en la calle entonces le empecé a gritar y fue ahí que me agarraron entre varios, me pegaron y me esposaron", dijo al portal Conclusión.com.
En tanto, desde el Ministerio de Seguridad se indicó que Asuntos Internos inició sumarios administrativos al personal involucrado y "se evalúa tomar medidas sancionatorias".