La invitación al espectador a saltar la empatía pasiva con los personajes e intervenir, de hecho, en la toma de decisiones narrativas, es un recurso con historia, que se volvió noticia en el verano. Así como el episodio interactivo Bandersnatch, de la serie británica Black Mirror, causó primero sorpresa en los usuarios, luego sorna en las redes y finalmente un juicio millonario en los tribunales de Vermont iniciado por los editores de la saga de libros Elige tu propia aventura, la idea de que el espectador “aconseje” a los personajes qué hacer ante cada imprevisto ha habilitado otras manifestaciones. Una de ellas es la webserie argentina Elige, que desde su título admite su filiación –al menos, en cuanto al formato– con la clásica colección de libros para chicos y adolescentes en los que el lector podía, precisamente, elegir. La primera temporada de Elige, estrenada en YouTube, fue desarrollada por la productora Aeroplano y aparece fraccionada en piezas breves: al final de cada una, dos links invitan a decidir cómo seguir. Con protagónicos de Malena Sánchez, Lucas Pose, Gastón Cocchiarale y Martín Garabal, Elige propone una historia de diversión juvenil: un grupo de amigos que prepara una salida, en la que los invitados que se suman, los imprevistos y los volantazos dejan en manos del público la toma de decisiones. ¿Y cómo funciona narrativamente ese recurso? ¿Hay una historia principal y otras, en todo caso, menos importantes, que tal vez ni siquiera sean vistas, según las decisiones que tome cada espectador? Responde a PáginaI12 Marcos Osorio Vidal, experimentado guionista a cargo de los guiones de Elige, que también ha escrito para series como Hermanos & detectives o El Jardín de Bronce: “No sé si la palabra es ´importante’… todas las tramas son importantes en una ficción. Los guionistas estamos acostumbrados a pensar varias líneas a la vez; una línea en paralelo, que se toque de alguna forma con la línea principal, las líneas paralelas que uno arma constantemente para llevar adelante un thriller... En cuanto a si van a ser vistas o no, me cuido bastante de que cada decisión tenga un final en sí misma y que no afecte la trama madre. Aunque, si uno puede contar la trama principal sin las subtramas, es que algo está fallando; deberían nutrirse mutuamente. En ese sentido, Elige es bastante parecida a una ficción clásica. Hay una trama madre y varias subtramas. Particularmente, en esta temporada, los puntos de vista están compartidos. Pero no tiene que ver con el formato, tiene que ver con la historia que decidimos contar.” No obstante los puntos en común con los géneros de TV más convencionales, escribir bajo este formato supone nuevas posibilidades. Así evalúa el guionista de Elige: “Lo que cambia es el sentido del tiempo; los episodios de Elige duran 10, 12 minutos y uno tiene que concentrar la historia e identificar sus puntos fuertes; ahí está el secreto, creo yo, en poder uno darse cuenta de qué contar, exactamente, en esos pocos minutos. Por otro lado, al ser distinta la plataforma, también es distinta la forma en la que el espectador sigue la serie. Tengo amigos que la han visto de corrido y otros que la han pausado. Amigos que la han visto en la compu, otros en la tele y otros en el celular. De alguna forma, lo que tiene la serie web es la comodidad de elegir. Y un poco, de eso se trata Elige, ¿no? De qué, cómo y cuando decidimos hacer las cosas.
El tributo de Elige a los libros de Elige tu propia aventura es, también, generacional. “La temática adolescente de la historia tiene que ver con la génesis de Elige”, revela Osorio Vidal. “El director de la serie, Nicolás Parodi, y yo, en nuestra infancia/adolescencia nos comimos todos los libros de Elige tu propia aventura y calculo que con Elige, lo que hicimos fue volver un poco a ser esos ‘pibes’ y a intentar contar algo vinculado con esa edad. Elige tu propia aventura marcó bastante mi infancia y me animaría a decir que marcó bastante mi futuro; yo era fan, y haberme convertido en guionista de ficción tiene mucho que ver con las cosas que leí de chico”.