La provincia de San Luis fue declarada “Estado llamante" por la Dirección Nacional de Migraciones, que depende del Ministerio del Interior. Ese estatus migratorio que le permitirá recibir refugiados de cualquier parte del mundo. El primer contingente llegará en marzo próximo y estará integrado por cinco familias sirias.
La categoría fue adjudicada luego que el gobierno provincial enviara una carta a la Dirección Nacional de Migraciones el 19 de enero pasado solicitándole al director del organismo, Horacio García, inscribir a San Luis como “estado requirente”, según indicó la agencia de noticias provincial.
La declaración habilita a la provincia a recibir migrantes de cualquier lugar del planeta que huyan de conflictos bélicos, hambrunas o que quieran salir de campos de refugiados e insertarse en otro país. También le otorga la facultad de convocar a instituciones privadas a integrarse como adherentes activos a la red de contención de refugiados.
“Fue una noticia maravillosa para nosotros, algo muy importante porque lo esperábamos”, expresó la coordinadora del Comité de Refugiados, Liliana Scheines, quien informó que en los próximos días está prevista una reunión con los intendentes que manifestaron su intención de adherir a la iniciativa del Ejecutivo provincial.
En San Luis las gestiones comenzaron por medio de las fundaciones FISAL y Quántica y fueron anunciadas en septiembre de 2015, cuando abrieron los contactos con la Dirección Nacional de Migraciones y con ACNUR, la agencia de la ONU para los refugiados, con la finalidad de servir de enlace para la llegada a San Luis de refugiados sirios.
La iniciativa recibió un fuerte impulso del gobernador Alberto Rodríguez Saá tras su viaje a la “Cumbre sobre Europa: los refugiados son nuestros hermanos” que se realizó en diciembre en el Vaticano. Luego de esa cumbre se abrió un registro y se hicieron contactos con familias y descendientes sirios radicados en la provincia.
En marzo se prevé la llegada de cinco familias y el gobierno puntano espera luego recibir a unos 3 mil refugiados.