Dos asesinatos ocurridos con pocas horas de diferencia en Capitán Bermúdez estremeció a esa ciudad del cordón industrial. El primero de ellos ocurrió el lunes por la mañana, en el barrio Copello. Una persona que hasta ayer no había sido identificada irrumpió de repente y con un arma de fuego en alto en la vivienda de Marcelo Cisneros y su pareja, Marcela P., de 46 años. Derribó una puerta a patadas y abrió fuego sin mediar palabras. Varios disparos resonaron. Cisneros, de 48 años, murió acribillado por varios balazos, y su mujer pudo ser internada en el policlínico Eva Perón, de Granadero Baigorria, en estado reservado. El homicida, en tanto, escapó en moto. El fiscal de San Lorenzo, Aquiles Balbis, aguardaba la evolución de Marcela P. para interrogarla y establecer hipótesis que expliquen el ataque. Además, ordenó la presencia de gabinete criminalistico de PDI para peritajes varios, toma de testimonios y relevamiento de cámaras en la zona. Esa misma noche de lunes, a las 22.30, murió Jonathan Anguilente en el cruce de calle Gaboto y las vías del ferrocarril. El fiscal Balbis ignora por qué un hombre -de quien nada se sabe aún- sorprendió al joven y le prodigó varios tiros con una pistola 9 milímetros: así mató a Anguilente e hirió a un amigo de este, que escapó a la carrera y luego se fue por sus medios al hospital de Granadero Baigorria.
