A partir del viernes, se levantarán parte de las medidas restrictivas impuestas a los habitantes de Epuyén, la localidad del noroeste de Chubut donde a principios de diciembre se declaró un brote de hantavirus que provocó 11 muertos. “El ánimo de la población está mejor y a partir de este viernes primero de febrero voy a levantar casi todas las medidas restrictivas que se dictaron por resolución, como por ejemplo la prohibición de reuniones, (la limitación) de horarios y el uso de barbijos en los lugares públicos”, anunció el intendente del pueblo, Antonio Reato.
El funcionario adelantó que, de todos modos, se mantendrán “los mínimos cuidados en los lugares cerrados por unos 10 días, hasta mediados de febrero, porque si aguantamos tanto cómo no vamos a aguantar un poco más”.
A principios de enero, mediante una resolución municipal, en Epuyén se suspendieron “todas las actividades grupales por el período de cuarenta días corridos” debido “al alerta sanitario impuesto en relación a los contagios interhumanos por hantavirus”.