Los cortes de luz continuaron durante la jornada, calurosa pero más soportable que las del lunes y martes. El flujo de interrupción del servicio contabilizó a las seis de la tarde unos 45 mil usuarios en el área metropolitana de Buenos Aires. El martes, con un pico de 110 mil usuarios afectados a las siete de la tarde, el número total de usuarios que en algún momento de la jornada no tuvieron luz ascendió a 478 mil, casi el 9 por ciento del total de clientes de Edenor y Edesur. El Gobierno buscó despegarse del enojo ciudadano con la versión habitual de que el organismo de control, el Enre, aplica sanciones cuando hay cortes y que la duración de los mismos se redujo en relación a lo que sucedía con el gobierno anterior, hace más de tres años y con tarifas que en el transcurso aumentaron el 2000 por ciento. De todas formas, cientos de usuarios se quejaron por cortes de más de 24 horas y por el nuevo tarifazo que se aplica este mes.
Entidades de consumidores advirtieron que en el tercer cordón del conurbano bonaerense la situación del servicio de distribución eléctrica es mucho peor que en los barrios de la Ciudad de Buenos Aires. Los cortes de luz en el AMBA estuvieron por debajo del nivel del martes, cuando la sensación térmica trepó hasta los 45 grados, pero quedaron por encima del lunes. A las 12 del mediodía había unos 60 mil usuarios sin luz, 53 mil a las dos de la tarde y 39 mil a las tres. Luego, los números empeoraron hasta unos 45 mil usuarios afectados, unos 29 mil de parte de Edesur y 16 mil en el área de concesión de Edenor.
Los barrios porteños más afectados fueron Almagro, Villa Crespo, Montserrat, Balvanera, Recoleta y la localidad bonaerense de Máximo Paz (Cañuelas) por parte de Edesur. Mientras que en el área de Edenor resaltaron las complicaciones en el Delta del Tigre, Benavidez (Tigre), San Miguel, San Fernando y el barrio de Palermo. "Los cortes pueden durar horas o uno, dos o hasta cinco días. Hay zonas particularmente castigadas, como Ezeiza, Presidente Perón, Esteban Echeverría, Lanús y Almirante Brown", plantean desde la entidad de consumidores Deuco, que sigue muy de cerca el tema.
"Siempre que hay cortes de luz el Enre actúa y pone sanciones", se limitaron a decir extraoficialmente en Casa Rosada. Luego justificaron que "durante el último gobierno de Cristina Fernández hubo un promedio de cortes de luz de 19,3 horas por usuario por semestre, con picos de 35 horas en el área de concesión de Edenor y Edesur. Ahora en la gestión de Mauricio Macri el promedio de cortes bajó a 14,3 horas. Ha mejorado en un 26 por ciento la duración de los cortes. No se puede arreglar en tres años lo que no se ha invertido en las redes de distribución a lo largo de los últimos diez".
Ese dato de reducción en la duración de los cortes, que brindan las empresas Edenor y Edesur, sin embargo, no da pistas sobre la cantidad de usuarios afectados ni sobre la distribución geográfica de los problemas. Además, no aclara el hecho de que la tarifa eléctrica de un usuario de consumo promedio pasó de 20 pesos mensuales en 2015 a 642 pesos en la actualidad y llegará en marzo a 922 pesos, un aumento de 46 veces. De hecho, mañana comienza a regir la primera parte del aumento en la luz previsto para este año, que llegará en forma acumulada al 50 por ciento. Además, entidades de consumidores advierten que el funcionamiento del Enre ha caído de manera significativa y que cada vez ofrece menos protección a los usuarios.