La EPE respondió a un pedido de informes de la Defensoría del Pueblo sobre los impactos del aumento mayorista en la tarifa eléctrica y su traslado a la tarifa. Cammesa fijó para febrero un 19,3% de aumento para febrero, 5% en mayo y otro 5% en agosto. La EPE efectuó los cálculos y para las pequeñas demandas el impacto será del 18,6%, mientras que para las grandes demandas será del 23,4%. Profundizando el análisis respecto de lo que llaman "las pequeñas demandas", desde la Defensoría observaron que el aumento para los usuarios residenciales será del 19,3%, para los comerciales 16,8%, para el sector industrial 19,6%, y a instituciones 18,9%.
Para dimensionar el impacto de los costos mayoristas, que en 2017 representaron un 49% del total del gasto anual de la empresa, desde la EPE precisaron que los usuarios residenciales de menor consumo pagarán en agosto del 2019 un 5980% más en concepto de energía mayorista que lo pagado en enero de 2016 ($38,30 contra $2326 el Megavatio hora). Para los usuarios generales no residenciales (comercios, industrias, instituciones) el aumento medio en el mismo lapso de tiempo será del 2561%.
Según lo informado a la Defensoría, la distribuidora provincial tenía presupuestado 18.700 millones de pesos (con impuestos) para la compra de energía de 2109. Con la entrada en vigencia de los nuevos precios mayoristas va a necesitar un 9.700 millones de pesos adicionales. "Este nuevo aumento implica para la EPE tener que recaudar un 47% más de lo que tenía previsto para ese rubro, a los fines de pagar la compra de energía mayorista a Cammesa para el año 2019", señala el informe. También recordaron que "el gobierno provincial absorbe los costos de la tarifa social representando un gasto de 1500 millones de pesos".
