La inversión se contrajo 5,6 por ciento el año pasado, a su menor nivel desde 2009, según un estudio de la consultora de Orlando Ferreres & Asociados. Solamente en diciembre la caída fue del 19,2 por ciento interanual, medido en términos de volumen físico, siendo el séptimo registro negativo consecutivo, lo que explica en gran medida la contracción acumulada de 2018. El peso de la inversión en el Producto Interno Bruto medido a precios constantes en diciembre se ubicó en el 20,9 por ciento (6831 millones de dólares), aunque debe tenerse en cuenta la también contracción de la actividad económica. La principal caída en la inversión estuvo enfocada en menor cantidad de compras de maquinarias y equipos, que lideraron el desplome. “La caída en los niveles de inversión evidenciada durante diciembre es la segunda más grande del año, después del derrumbe de noviembre”, destaca el informe.