Un empresario murió de un balazo en la cabeza y un policía que lo custodiaba resultó herido, cuando una banda de asaltantes los atacó con ametralladoras para robar seis millones de pesos que las víctimas iban a depositar en un banco, en el partido bonaerense de Florencio Varela. El empresario, Aldo Oscar Venturini (69), era el dueño de la empresa distribuidora de cigarrillos, galletitas y golosinas Casa Dany, ubicada en avenida San Martín 338, del mismo partido.

Venturini salió de la distribuidora, alrededor de las 10 de la mañana, al volante de su furgón Renault Master color blanco en el que lo acompañaban dos policías uniformados que realizaban un servicio de Policía Adicional y un empleado suyo.

Según los investigadores, Venturini se dirigía a la sucursal del Banco Provincia en el Cruce de Varela para depositar dinero de la empresa –una cifra cercana a los seis millones de pesos en efectivo–, pero al llegar a República de Francia y José Blanco, a unas nueve cuadras de la distribuidora, fue interceptado por una camioneta, al parecer una Ford Ranger. En la camioneta viajaban entre cuatro y seis hombres. Dos de ellos bajaron con los rostros cubiertos por capuchas, y comenzaron a disparar de frente a la Renault Master con ametralladoras calibre 5.56 milímetros.

“Mientras estos dos tiraban, sus cómplices fueron por los bolsos con el dinero”, explicó una fuente policial y agregó que los uniformados que custodiaban al empresario repelieron la agresión con sus pistolas, por lo que se originó un intenso tiroteo en el que la Renault Master recibió al menos 20 impactos de bala.

Uno de los disparos impactó en la cabeza de Venturini, quien murió dentro del furgón, y otro hirió en un pie a uno de los custodios, identificado como el teniente primero Leonardo Flores.

Tras el enfrentamiento, los asaltantes huyeron con el dinero y a bordo de la camioneta, mientras que Venturini quedó muerto en el lugar y el policía baleado fue trasladado al Hospital El Cruce, situado a pocas cuadras de la escena.

En tanto, policías de la comisaría 3ª de Varela secuestraron poco después una Ford Ranger, patente LXU 843, abandonada a unas siete cuadras del lugar del tiroteo, junto al predio de la Universidad Nacional Arturo Jauretche. El vehículo es peritado y se cree que fue la pick up utilizada por la banda, ya que hallaron manchas de sangre en el asiento del acompañante –se supone que uno de los delincuentes resultó herido en el tiroteo–.

Además, un testigo declaró haber visto al menos cinco hombres descender de la misma a la carrera, cargando bolsos.

Los testimonios recogidos en el lugar describieron que los asaltantes continuaron la fuga en un auto Chevrolet Agile. El investigador consultado señaló que ya fueron solicitadas las imágenes de diversas cámaras de seguridad de la Municipalidad de Florencio Varela en busca de pistas sobre los delincuentes que conformaban una banda “con una logística importante y con datos precisos” sobre la víctima y sus movimientos. Por ello es que la principal hipótesis que se manejan es que a Venturini lo “entregaron”, añadió una fuente del caso. El dato del depósito estaba en conocimiento de Venturini. Los investigadores deberán analizar su entorno. Pero también estaban enterados el empleado y dos policías, que a su vez habían sido autorizados por sus superiores.

El empresario residía junto a su familia en el mismo barrio donde funciona su distribuidora, por lo que era conocido entre los vecinos de la zona que esta tarde se acercaron a la empresa y expresaron su consternación.

“No tenía enemigos. Esto fue para sacarle su dinero”, indicó María Luisa, una comerciante que le compraba cigarrillos a la víctima.

La causa por el homicidio de Venturini quedó a cargo de la fiscal Mariana Bongiovanni, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) descentralizada 2 de Florencio Varela.