El editorial del diario La Nación, que celebró como "amor y valentía" la gestación de embarazos de niñas que fueron violadas, fue repudiado por un amplio espectro de organismos públicos y organizaciones sociales locales e internacionales que trabajan por los derechos de la infancia, entre ellos Unicef y Amnistía Internacional, como así también por trabajadoras y trabajadores del diario y por múltiples voces del feminismo, que el diario centenario calificó como "los pañuelos verdes que no han aceptado la derrota legislativa". Desde el Congreso tampoco faltaron rechazos.
"El embarazo en la infancia no está vinculado al ‘instinto materno’, es abuso sexual y por tanto el embarazo es forzado", sentenció Unicef en respuesta a la editorial titulada "Niñas madres con mayúsculas". El organismo internacional subrayó que "es obligación de los Estados garantizar esta protección: es un derecho humano" frente al texto editorial que celebra como una niña violada a las 12 y a los 14 años, "cuando su tía se la 'olvido' en casa de un muchacho", continuó con el embarazo.
Por su parte, Amnistía Internacional señaló que, solo en 2017, 2493 niñas menores de 15 años atravesaron por un parto y resaltó que la mayoría fueron producto de "embarazos infantiles forzados como consecuencia de situaciones de abuso sexual y violencia". Hechos de abuso que, en la Argentina, en un 53 por ciento de los casos "suceden en el hogar" de las víctimas, específicó el organismo.
Amnistía rechazó el texto de La Nación por "desconocer los derechos humanos de las niñas" y recordó que "la Convención sobre la Eliminación de toda forma de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) manifestó al Estado argentino preocupación ante el alto número de niñas que abandonan la escuela debido a embarazos precoces".
"El embarazo infantil está íntimamente ligado al abuso. La maternidad forzada es una forma de tortura y suma una violación más a los derechos de estas niñas", sintetizó la Fundación Huésped en sus redes para sumarse a la ola de repudios, que fueron trending topic con el hashtag #NiñasNoMadres, utilizado por el movimiento feminista para comunicar las acciones de rechazo a la cesárea a la que se forzó a una niña de 12 años en Jujuy pocos días atrás en abierto incumplimiento del protocolo de Interrupción Voluntaria del Embarazo.
"El editorial de La Nación celebra los embarazos en niñas de 12 años violadas, difunde falacias sobre el 'instinto materno', omite un derecho existente desde 1921 y hace apología de la maternidad forzada. Todas vulneraciones de los derechos humanos", completó el director ejecutivo de Fundación Huésped, Leandro Cahn.
En tanto, la red de organizaciones sociales Infancia En Deuda subrayó que, en la Argentina, "ocho de cada 10 embarazos de niñas menores de 15 años no son intencionales y la mayoría de esos embarazos son consecuencia de abuso sexual" y agregó que "cuanto menor es la edad de la madre, más probable es la existencia de delito sexual y, por ende, el riesgo de salud física y mental". La red también resaltó que, según los datos de la Línea Nacional contra el Abuso Sexual Infantil, 7 de cada 10 víctimas de abuso sexual son niñas y más de la mitad son menores de 11 años.
El repudio al editorial del periódico porteño, cuya lema histórico es el de "tribuna de doctrina", también llegó a la Asesoría Tutelar porteña. La asesora Yael Bendel consideró "muy grave que se banalicen graves delitos". El comunicado de la Asesoría Tutelar cuestiona los supuestos testimonios de las niñas que decidieron continuar con sus embarazos y señala que cada vez que se abordan casos de embarazos producto de violaciones se "debe hacer interdisciplinariamente para atender el dolor, la mutilación física, la vergüenza y el estigma de las niñas que atraviesan por esta situación".
"No hay que 'admirar a las niñas madres' sino que hay que protegerlas, cuidarlas y evitar este tipo de delitos, y en ese compromiso también se encuentran los medios de comunicación. Que deben promover valores, derechos y el cumplimiento de las leyes vigentes de protección integral a la infancia", sentencia el organismo público.
Desde el sitio especializado Economía Feminista aportaron más información al repudio generalizado. "En la Argentina, cada 5 minutos nace el bebé de una madre adolescente y cada 3 horas el de una niña menor a 15 años", se advirtió de la cuenta de Twitter de Economía Feminista y se insistió: "En nuestro Código Penal, desde 1921, se contempla el aborto por causales y la violación es uno de ellos. La nota hace apología de este delito en tanto pasa por alto el derecho a informar sobre esta opción a las niñas".
El texto también hizo eco en el Parlamento, aquel donde se produjo "la derrota legislativa" de la legalización del aborto, que la editorial celebra en la primera línea para atacar al movimiento feminista. "Una niña embarazada es una niña violada", afirmó la diputado nacional del PRO Silvia Lospenatto, una de las impulsoras de la legalización del aborto junto al recordado grupo multibloque "Las sororas". "La ley de interrupción voluntaria del embarazo justamente es ¡voluntaria!", resaltó Victoria Donda, otras de las diputadas sororas, y agregó: "Nadie puede obligar a una niña que quiera continuar un embarazo".
Desde la bancada de Evolución, la diputada Carla Carrizo calificó de "apologista" la editorial y denunció que "comunicar así nos hace responsables: una niña embarazada es una víctima. Cualquier otra interpretación viola la ley". En tanto, Lucila De Ponti, diputada sorora del Movimiento Evita, sintetizó: "Legitimar la violencia, naturalizar la violación de niñas, atrasar cien años en el debate sobre derechos humanos de las mujeres: solo algunos de los objetivos que alcanza esta miserable nota de La Nación. Mientras matan a una de nosotras todos los días".