El ex ministro de Hacienda de la provincia de Santa Cruz Juan Manuel Campillo fue finalmente excarcelado bajo palabra luego de ser detenido en noviembre en el marco de la causa por las fotocopias de los cuadernos de Oscar Centeno. Se trataba del único imputado que habiéndose acogido al régimen del arrepentido, continuaba preso en esa causa. En contraposición, le fue rechazado el planteo al ex secretario de Cristina Fernández de Kirchner, Isidro Bounine, quien permanecerá en prisión. Ambos están acusados de haber participado de presuntas maniobras de lavado de dinero que se le atribuyen a Daniel Muñoz, el fallecido ex secretario de Néstor Kirchner.

El juez federal Claudio Bonadio dispuso la liberación del ex funcionario bajo el juramento de permanecer a disposición de la investigación, luego de que esta semana ampliara su declaración y aportara nuevos datos. La decisión del magistrado se produce luego de que la defensa oficial de Campillo, Gustavo Kollman, realizara un duro cuestionamiento ante la Cámara Federal porteña. Kollman rechazó la posición del magistrado sobre la presunta posibilidad de entorpecer la investigación por parte del ex funcionario provincial. “Parece absurdo considerar que un individuo que solicita acogerse al régimen del imputado colaborador, celebra un acuerdo con el fiscal con todas las garantías y obligaciones que le impone ley, que es formalmente tenido en tal carácter a partir de la homologación judicial de dicho pacto, pretenda entorpecer la investigación. Cabe preguntarse, ¿colabora o entorpece?”, sostenía el texto de la apelación.

Campillo fue señalado en la causa por otra arrepentida, Elizabeth Ortiz Municoy, también excarcelada, y vinculada a la venta de inmuebles en Estados Unidos del fallecido secretario privado del ex presidente Kirchner. En su declaración como arrepentido, Campillo sostuvo que él fue llamado a opinar sobre los manejos del dinero de Muñoz y que quien lo convocó fue Isidro Bounine, quien fuera secretario privado de la ex presidenta hasta 2011. Al ser indagado por Bonadio, Bounine negó haber participado de las maniobras de lavado de dinero investigadas.

Muñoz fue señalado en la causa como quien transportaba los bolsos con las supuestas coimas que figuran en las fotocopias de los cuadernos del ex chofer del Ministerio de Planificación. Bounine rechazó haber intervenido en esa trama de supuesto lavado y haber recibido un pago de 230 mil euros por intervenir como una especie de asesor en la ingeniería societaria que querían rearmar en Miami y Nueva York, con venta de inmuebles y sociedades.