Desde Caracas
La impresionante movilización que realizó el chavismo sirvió para que el presidente constitucional Nicolás Maduro le mostrara a los Estados Unidos, y por ende a la oposición, que el chavismo está mucho más vivo de lo que piensan y decidido a defender la revolución bolivariana que ayer cumplió 20 años desde la llegada de Hugo Chávez a la presidencia. En ese contexto y ante los ataques, Maduro respondió con su disposición a aceptar la mesa de diálogo que promueven México, Uruguay y también Bolivia y los países del Caribe agrupados en Caricom. Eso sí, reclamó que se levanten las sanciones “y el robo del dinero por parte del gobierno” estadounidense. Pero sobre todo, Maduro desafió a la oposición al anunciar que se está trabajando en adelantar las elecciones parlamentarias para este mismo año y, como afirmó, “que sea el pueblo quien decida”.
Maduro llegó al escenario después del mediodía. El sol no parecía estar enterado de que en estas latitudes es invierno y caía como plomo sobre los cientos de miles que colmaban la avenida Bolívar. El mandatario jugó con unos binoculares para ver hasta donde llegaba la gran columna prácticamente vestida de rojo.
Durante su discurso insistió en la necesidad de habilitar el camino del diálogo que propuso México y Uruguay y que ahora se sumó Bolivia. Por caso, en la noche del viernes de regreso de los Estados Unidos aterrizó el avión del presidente boliviano Evo Morales. Ambos mantuvieron una reunión donde se habló de la necesidad de encontrar una salida política y una posibilidad es el adelantamiento de las elecciones. Maduro no descartó ese camino y cuando habló ante la multitud trajo a colación este punto pero, a diferencia de lo que reclama la oposición dijo que, por una iniciativa de la Asamblea Nacional Constituyente, van a adelantar los comicios parlamentarios. Juan Guaidó que quiere nuevas elecciones presidenciales tiene cerca la finalización de su mandato y es por eso que el gobierno chavista planteó esta variante para poner en jaque al diputado que, por el discurso que dio una hora antes en la zona este de la capital venezolana, exigió elecciones presidenciales como requisito indispensable para la salida pacífica (ver nota aparte).
A la intención de adelantar los comicios parlamentarios, el mandatario venezolano indicó que junto a la Asamblea Constituyente van a promover la realización de “una consulta nacional” a través de los denominados Cabildos Bolivarianos Abiertos donde además participarán los gobernadores “para consultarle al pueblo esa solución política, esa salida constitucional” y que caracterizó como democrática y libre. Luego envió un estiletazo a la oposición al sostener que “podemos hacerla consensuado con una mesa de diálogo con la oposición, si ellos quieren nosotros queremos”.
Maduro se cuidó de responder a las consignas guerreristas que lanzan desde la oposición y siempre se mostró dispuesto a la paz y al diálogo: “Sigo llamando a la paz. A pesar de los intentos de Golpes de Estado, las amenazas externas, Venezuela está en paz, estamos ganando por la vía de la paz, hemos ganado la paz y se impuso nuevamente cuando no pudieron llenar de violencia a Venezuela, lo derrotamos con la justicia”, afirmó.
De todas formas, en su discurso no dejó de advertir que si bien se hará todo lo posible por garantizar la paz, la armonía y la unión nacional también recordó que “nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) está cada vez más leal, más comprometida, más unida al pueblo junto a la Milicia Nacional Bolivariana que está movilizada para hacer respetar la Constitución, por eso se quedaron loco”.
Por supuesto que el discurso de Maduro también tuvo un momento destinado al gobierno de Donald Trump a quien acusó de no estar de acuerdo con el diálogo: “Está a favor del Golpe de Estado que prepararon, financian y dirigen la intervención militar de Venezuela, de la guerra” . En ese sentido, le dijo a Trump que “lo tienen engañado” John Bolton, Mike Pence y Mike Pompeo “son tres halcones de guerra que están obsesionados con Venezuela, usted que se cree el emperador del mundo, cree que Venezuela se va a rendir y le va a obedecer sus órdenes pero le advierto que Venezuela no se rinde, sigue adelante, es rebelde, libre, soberana e independiente”.
Si hay una característica que tiene el chavismo es la alegría y ayer esa condición se repitió. Los bailes, las risas a todo volumen mezcladas con consignas en defensa de la revolución y contra la injerencia norteamericana se repitieron sin solución de continuidad. Una de las costumbres es levantar escenarios cada 200 o 300 metros donde se escuchará la voz y se verá la imagen de Maduro servirá también para amenizar la espera con grupos locales de música que hicieron bailar a los manifestantes antes y después del discurso presidencial.
Remeras y gorras rojas con la cara de Chávez o sus ojos o una de sus tantas frases y consignas. También se ve la M de Maduro con los colores de la bandera venezolana y los uniformes de las Milicias Bolivarianas, creadas por Chávez en 2007, rompían la tendencia del rojo por el color caqui de sus uniformes. “Vamos a defender la patria como sea, con el alma, con el corazón, con lo que tengamos en la mano y hasta con la bandera y su asta”, aseguró uno de los participantes mientras blandía la bandera que portaba. Eso sí, al final lanzó una advertencia: “No vamos a huir”.
A pocos metros de allí, entre miles, José le dijo a PáginaI12 que, como ordenó en su momento el presidente Chávez, “estamos rodilla en tierra dispuestos a defender estos 20 años de revolución”, dijo y aseguró que “no nos importa que el imperialismo yanqui se venga para estas tierra. Vendrán pero no saben cómo saldrán”, se envalentonó. Ricardo, un ex militar jubilado, insiste con que “acá no se mueve nadie, acá estamos todos defendiendo a la revolución de Hugo Chávez Frías”. En tanto, Irene sostiene que ella creció con la revolución y eso la hace feliz: “Era niña cuando llegó nuestro comandante eterno y ahora soy parte del poder popular que no sólo defenderá la revolución sino también a Nicolás Maduro al que le digo que unidos jamás seremos vencido”. Antes de irse aclaró que el chavismo también está festejando “los primeros 20 años de chavismo”. Mientras Irene hablaba con este diario un niño escuchaba, cuando la mujer finalizó entonces pidió hablar: “Un saludo revolucionario para todo el mundo”.