“Es muy contradictorio que, justamente cuando Bolivia está avanzando hacia la universalidad y la gratuidad en todo su sistema público, se pretenda hacer una crítica como la que hemos escuchado en relación con nuestro sistema de salud”, dijo a PáginaI12 la ministra de Salud de ese país, Gabriela Montaño, tras la segunda carta del gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, que –con tufillo xenófobo– denunció “destrato” a Manuel Vilca, un músico accidentado el 8 de diciembre en Bolivia y atendido en el Hospital General de Oruro.
El mandatario provincial insiste en su cruzada contra el gobierno de Bolivia. En la segunda carta que da a conocer sobre el caso, esta vez dirigida directamente a Montaño (la primera tenía como destinatario al presidente Evo Morales), volvió a denunciar el supuesto “destrato” sufrido por Vilca y solicitó a las autoridades del país limítrofe que “se le reintegre todos los gastos que en concepto de prestaciones de salud le fueron pagados para utilizar el servicio sanitario de su país”. “Son muchos los ciudadanos bolivianos que emigran constantemente al mío, y en particular a mi provincia, para buscar soluciones sanitarias que evidentemente en el suyo no las encuentran, ya sea por falta de accesibilidad al servicio, diferencia de tecnología o recursos humanos”, expresó Morales, dejando entrever el sesgo xenófobo que, siguiendo el manual de Jaime Durán Barba, suele tener buenos resultados en años electorales. Además, aprovechó para difundir, en algunos medios afines, los tickets con el detalle de los gastos hospitalarios, aunque sin aclarar que se trataba, en mayor medida, de los servicios prestados en la clínica privada de Cochabamba a la que Vilca fue trasladado por decisión propia.
La ministra de Salud de Bolivia, tras aclarar que no buscará “entrar en la lógica que el gobernador Morales está planteando”, señaló a este diario que esa “igualdad” exigida por el mandatario jujeño ya existe. “Siempre ha sido así, y va a seguir siendo así: toda la cobertura de salud pública que tenía un boliviano o una boliviana, también estaba dada para hermanos extranjeros habitantes en nuestro territorio, y toda la ampliación de beneficios que se va a alcanzar ahora también estará dada para extranjeros y, con mayor razón, para hermanos latinoamericanos y de países limítrofes”, explicó Montaño, en alusión a la creación del Sistema Único de Salud mediante una norma tratada en la Asamblea Legislativa Plurinacional que entrará en vigencia el 1º de marzo. “Esta ley va a lograr que toda la población tenga acceso a una serie de prestaciones y productos que hasta el momento no tenía acceso. Estamos hablando, principalmente, de la población que no estaba cubierta por un seguro: trabajadores informales, comerciantes, cuentapropistas, campesinos y campesinas”, indicó la funcionaria.
Montaño, además, ratificó lo que ya había explicado: que, tras su accidente, Vilca estuvo cinco días internado en el Hospital General de Oruro –un establecimiento público–, donde le realizaron una cirugía en el pie derecho y que, por decisión propia, continuó su recuperación en una clínica privada de Cochabamba. “Respetamos su decisión, pero como cualquier clínica privada en cualquier parte del mundo, son servicios que se cobran con costos mucho más altos de los que podrían darse en un sistema público”, dijo la ministra. También volvió a aclarar que el músico accidentado no tuvo que pagar por la atención médica que recibió en el hospital de Oruro, dado que se trasladaba en un transporte público cubierto por un seguro.
“Somos el país que más crece en la región y nos sentimos muy orgullosos de todo lo que hemos avanzado, entonces, me parece muy contradictorio que justamente hoy, que Bolivia avanza, se pretenda hacer una crítica como la que hemos escuchado en relación con nuestro sistema de salud”, afirmó Montaño, y concluyó: “Lo que recibe un boliviano o una boliviana lo recibe también un hermano argentino que está en territorio boliviano, y se lo trata de la misma manera. Por eso no tiene un asidero real lo que se está diciendo”.
Informe: Sibila Gálvez Sánchez.