La Dirección de Salud y Educación Ambiental de Acumar afirma que los resultados del estudio de caracterización de suelo que el organismo está realizando en Villa Inflamable “serán de gran importancia para completar el diagnóstico de salud ambiental de los niños que están en seguimiento porque tienen niveles inaceptables de contaminación con plomo, y para ayudar a prevenir las futuras exposiciones”. Además, desde dicha área sostienen que “dan seguimiento toxicológico en forma periódica a 92 habitantes de Villa Inflamable siguiendo los lineamientos de la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación”.
Explican que “el abordaje integral de cada caso incluye la evaluación del riesgo, el dosaje de plomo en sangre, la búsqueda de fuente de exposición al plomo y la evaluación de las condiciones socios sanitarias ambientales en las que se encuentra la familia”. Y agregan: “en función de dicha evaluación integral el médico tratante decide la intervención, el requerimiento de interconsultas y la pertinencia o no de notificar a otros organismos”.
Asimismo, desde la Dirección de Salud y Educación Ambiental de Acumar destacan que “el equipo de Gestores de Casos de la Unidad Sanitaria Ambiental de Avellaneda realiza visitas domiciliarias y entrega turnos con especialistas en toxicología”. Al mismo tiempo “complementan la evaluación realizada en la consulta médica identificando donde se encuentra la vivienda y las condiciones habitacionales”.
También resaltan que “se busca identificar la fuente de exposición al plomo a través de su medición en el suelo de los alrededores del domicilio, o dentro del mismo, por medio del Autoanalizador Portátil de metales por Fluorescencia de Rayos X (XRF) de Lectura Directa”. Y agregan que “a partir de estas valoraciones se ha podido detectar que muchos de los casos tienen como fuente problable, la contaminación resultante del acopio o la quema de cables, actividad que se realiza para la recuperación de metales, en el mercado informal de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE)”.
También sostienen que “durante las entrevistas con las familias se realiza la sensibilización acerca de la importancia de concurrir a las consultas con el profesional toxicólogo”. Y añaden que a la vez “se refuerzan pautas higiénico dietéticas, así como recomendaciones para evitar que las actividades potencialmente contaminantes no se realicen en los domicilios ni en las proximidades, y se evite que los niños jueguen en sitios que puedan estar contaminados con metales”.