La Selección Sub 20 logró la clasificación al Mundial de Polonia luego de vencer 2-0 a Uruguay en el estadio El Teniente de Rancagua, en la penúltima fecha del Hexagonal final del torneo Sudamericano que se juega en Chile. Con tantos de Aníbal Moreno y Gonzalo Maroni, uno en cada tiempo, el equipo que conduce Fernando Batista fue un justo vencedor, ya que aguantó los embates del rival pese a la expulsión de Facundo Medina en el complemento. Si Argentina le gana este domingo a Brasil, y Ecuador no gana uno de sus dos encuentros programados, será el campeón del certamen.
El arranque fue muy parejo, con dos rivales más preocupados por alejar la pelota lo más que se podía del área propia que de generar situaciones de riesgo en la de enfrente. A eso se sumaban las imprecisiones y la típica enjundia de un clásico rioplatense. Por eso hubo que esperar a que pasara un cuarto de hora para la primera jugada de riesgo que fue para Uruguay a través de un tiro libre que devino en sucesión de rebotes, donde el último de ellos pudo ser conectado por Sanabria, aunque en offside.
En la réplica, los juveniles de Batista hilvanaron una jugada en la que Maroni y Alvarez se asociaron con una linda pared, hasta que el chico de River abrió hacia el centro para que Moreno, a la carrera, despachara un zapatazo al ángulo y dejara sin chance alguna al arquero Rodríguez. Golazo para poner en un cuadro y que fue muy festejado por el presidente de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, presente en una de las plateas.
A partir de la ventaja, Argentina trató de tocar la pelota por abajo en procura de no rifarla. No siempre le salía, pero con la intención ponía nerviosos a los pibes de la Celeste, que empujaban para empatar, pero les costaba llegar con claridad al área de Roffo, sobre todo por la presión que ejercía la Selección, que se iría al vestuario un gol arriba.
Pese a estar en ventaja, Argentina salió con todo en el complemento. Ni se había cumplido un minuto cuando Pereyra se mandó al área uruguaya y abrió para Gaich, éste con lo justo cedió para Maroni, cuyo primer remate dio en un palo, pero en el rebote logró engrosar la cuenta. Dominaba Argentina y la desesperación era de Uruguay. Maroni pudo meter el segundo de su cosecha pero su disparo salió junto al palo. La expulsión de Medina envalentonó a la Celeste, que al final descontaría con Schiappacasse, pero no le alcanzó. Los pibes de Batista jugarán el Mundial y hasta sueñan con salir campeones.