Cuando parecía haber retornado la calma entre la Casa Rosada y Elisa Carrió, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, cuestionó a la líder de la Coalición Cívica. “Carrió está mala conmigo”, disparó la funcionaria, en respuesta a la diputada, quien la había acusado de “creerse Bolsonaro”. Carrió había definido a Bullrich como “muy buena con algunos temas y pasada de vueltas en otros, pero siempre controlable”. Dijo además que “el problema de Patricia es que no puede parar, entonces por ahí se cree Bolsonaro”, e inmediatamente sentenció: “Nosotros no vamos a ser Bolsonaro” y “general prusiana no va a ser”. Las críticas de Carrió apuntaban al argumento que suele utilizar Bullrich cuando compara su política de seguridad con la de Jair Bolsonaro: “Nosotros somos los maestros de las cosas que están haciendo en Brasil (el ministro de Justicia, Sergio) Moro y Bolsonaro”, dijo en más de una oportunidad. Tras los dardos de la diputada oficialista, la ministra amparó en el respaldo que dice recibir de parte de Mauricio Macri: “El Presidente nos apoya mucho, así que a los hechos me remito”, dijo. “Carrió está mala conmigo”, puntualizó. “No tengo ningún tipo de problema ni estoy mal con Carrió”, insistió y se defendió: “Preferiría que no, pero yo sé lo que estoy haciendo. Estamos haciendo lo que necesitaba la Argentina para salir de la anomia y de un mundo del revés”.