El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, tuvo un nuevo episodio de fiebre y podría padecer neumonía, indicó ayer el hospital en el cual convalece en Sao Paulo de una operación relacionada con el atentado que sufrió en septiembre pasado.
El mandatario “presentó, el jueves por la noche, un episodio aislado de fiebre sin otros síntomas asociados, fue sometido a una tomografía de tórax y abdomen que evidenció buena evolución del cuadro intestinal y una imagen compatible con la neumonía”, explicó el boletín médico divulgado por el Hospital Israelita Albert Einstein.
Bolsonaro, de 63 años, sigue internado en la unidad de cuidados semiintensivos del centro y recibe tratamiento con antibióticos, ampliado ahora por la sospecha de neumonía que no habría disparado, sin embargo, las alarmas de los doctores.
“Según conversé con los médicos, no me pareció que hubiera una alteración del nivel de preocupación”, afirmó el portavoz presidencial, ante la prensa reunida en el hospital. “Ellos conocen todas las vicisitudes de este cuadro y reconocen que a lo largo de la recuperación puede haber complicaciones”, añadió. El nuevo boletín supone, no obstante, un retroceso en la recuperación del mandatario, cuyo estado se encontraba “estable” el miércoles después de que unos primeros episodios le hicieran aplazar el alta prevista inicialmente para ese día.