Los casi treinta años que Carlos Stornelli lleva de actuación pública permiten realizar diversas asociaciones con su nombre. En los 90 saltó a los primeros planos como fiscal de la causa por tráfico de armas a Ecuador y Croacia, que derivó en el arresto domiciliario de Carlos Menem. De mediados de la década pasada se recuerda su paso por la secretaría de Seguridad bonaerense durante la gestión de Daniel Scioli y el papelón de esa cartera en la búsqueda de la familia Pomar, muerta en un simple accidente vial y a la que tardaron 24 días en encontrarla al costado de una ruta. Por entonces se acercó a Mauricio Macri en Boca y tejió un vínculo con el macrismo que el año pasado se hizo más que evidente con su desempeño en la causa de las fotocopias de los cuadernos de Oscar Centeno. Desde hoy su nombre queda ligado también a la denuncia de extorsión que realizó el empresario Pedro Etchebest.
Stornelli está al frente de la Fiscalía Federal 4 de la Capital Federal desde 1993, cuando el Senado aprobó su pliego de designación. Antes de eso había tenido un breve paso como fiscal ante los Juzgados de Menores de la Capital Federal.
Dos años después de ser nombrado fiscal federal, llegó a manos de Stornelli la causa que le dio trascendencia pública: la del tráfico de armas a Ecuador y Croacia. Por aquel caso a Menem se le dictó arresto domiciliario en junio de 2001.
Nacido en 1960 en la Ciudad de Buenos Aires, Stornelli estudió Derecho en la Universidad de Buenos Aires (UBA). Su padre fue el teniente coronel que encabezó la intervención de la ex Radio Belgrano durante la última dictadura cívico-militar y camarada de su ex suegro: Stornelli se casó con Claudia Reston. La mujer, de quien luego se separó es hija de Llamil Reston, ex ministro de Trabajo de Jorge Rafael Videla y titular de la cartera de Interior de Reynaldo Bignone hasta la vuelta de la democracia.
En 2007, el procurador general de la Nación Esteban Righi le concedió a Stornelli -quien le ofreció al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, hacerse cargo de la beba nacida de la cesárea a una niña violada- la licencia en su cargo para desempeñarse como secretario de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires. Su paso por la provincia se caracterizó por la revisión de las políticas introducidas durante la gestión de León Arslanian, quien en 2009 advirtió que su sucesor estaba encabezando una contrarreforma, asesorado “por la maldita policía”, es decir, el sector de la fuerza que en los 90 estuvo involucrado en casos de gatillo fácil, abusos y corrupción. Un año más tarde, Scioli designó a Ricardo Casal en su reemplazo y Stornelli, cuya gestión quedó signada también por la negligencia en la búsqueda de los Pomar, volvió a su fiscalía.
A través de su participación política activa en Boca Juniors, Stornelli comenzó a integrar el círculo de confianza de Macri y se convirtió en miembro de la Comisión de Seguridad creada por el ahora presidente en 2007. Allí el fiscal trabajó junto a otros destacados personajes de la Justicia, como el juez Ariel Lijo, los fiscales Raúl Plée y Gerardo Pollicita y el ex juez federal y ex ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Guillermo Montenegro. Stornelli, además, fue vocal titular de la Comisión Directiva del club, que hoy preside Daniel Angelici.