El dueño del diario matutino The Washington Post y de Amazon, Jeff Bezos, acusó ayer de extorsión y chantaje al editor del diario National Enquirer y líder de American Media Inc (AMI), un amigo cercano al presidente Donald Trump. El editor del Enquirer, David Pecker, difundió en enero que Bezos tenía una relación extramatrimonial con la periodista Lauren Sánchez, lo que motivó al ceo de Amazon a investigar cómo consiguió el diario esa información. Luego de semanas, Bezos arremetió ayer contra Pecker denunciando que fue extorsionado para abandonar su investigación. Según explicó Bezos, Pecker lo apuró con publicar fotos íntimas y mensajes de textos de la relación extramatrimonial que mantiene con la periodista.
En declaraciones públicas, Bezos insinuó que las publicaciones en su contra pueden haber surgido de la cobertura que hace el Post respecto de la presidencia de Trump y que hizo respecto del asesinato del periodista Jamal Khashoggi. Khashoggi, columnista de ese diario, fue asesinado el año pasado
y varias investigaciones apuntan a la cúpula saudí y sobre todo al papel que posiblemente tuvo el príncipe heredero, Mohamed bin Salman. Sin embargo, el presidente Trump se negó a poner en duda el accionar de su amigo saudí .
En declaraciones al medio web Medium, el ceo de Amazon recordó que Pecker fue investigado por la Justicia de Estados Unidos por colaborar durante las elecciones a la Casa Blanca de 2016 con la campaña de Trump y, según Bezos, también tiene vínculos con Arabia Saudí. El dueño del Post reveló también que Pecker llegó recientemente a un acuerdo de inmunidad por su papel en esa campaña. En su denuncia, Bezos recordó colaboraciones previas de AMI y Pecker con Trump, incluyendo pagos hechos para censurar o demorar noticias negativas, algo que suscitó una investigación de la Justicia federal. Uno de esos casos es el de una modelo de Playboy que dice que tuvo una relación con Trump. El pago secreto a cambio de su silencio, así como otro similar a una segunda mujer, fue hecho poco antes de las elecciones presidenciales que Trump ganó en 2016. Por este motivo el mandatario neoyorkino es sospechoso de haber violado las reglas financieras de la campaña porque presuntamente sus desembolsos fueron hechos a los efectos de influenciar en el resultado de la votación y por lo tanto deberían haber sido notificados.
“Mi propiedad del Washington Post me es problemática. Es inevitable que ciertas personas poderosas que experimentan las coberturas del Washington Post concluyan de manera equivocada que soy su enemigo”, dijo Bezos al portal Medium. “El presidente Trump es una de esas personas, lo cual es obvio por sus muchos tuits. La cobertura esencial e inexorable del Post del asesinato de su columnista Jamal Khashoggi sin duda es impopular en ciertos círculos”, agregó.
Bezos también publicó en Medium correos electrónicos que su abogado recibió del representante de Pecker, en los que se describían las fotografías íntimas que tienen en su poder y las que utilizaron como extorsión. “Me hicieron una oferta que no podía rechazar. O al menos eso creyeron las personas a la cabeza del The National Enquirer. Me alegra que pensaran eso, porque se animaron a ponerlo todo por escrito”, explicó Bezos en declaraciones al sitio. Además de cesar la investigación sobre la filtración, según los correos publicados por Bezos, Pecker también le exigía una rectificación sobre sus declaraciones acerca de que el origen de la cobertura tenía motivaciones políticas o influencias políticas.
Apenas el Enquirer difundió la información que comprometía a Bezos, Trump aprovechó la oportunidad para cargar contra él y el Post. “Qué pena oír las noticias de que Jeff Bozo (payaso) ha sido derribado por un competidor cuya información, entiendo, es mucho más precisa que la información de su diario lobbista, el Amazon Washington Post”, tuiteó.