Independiente puso fin a una racha de cinco partidos sin triunfos (tres empates y dos derrotas) al imponerse anoche ante Unión por 2-1 como local. Con este resultado, los dirigidos por Ariel Holan se acercaron a puestos de Copa Libertadores, mientras que los de Leonardo Madelón cortaron un invicto de tres encuentros.

Tras el pálido empate sin goles ante San Lorenzo en la última fecha, Holan le quiso imprimir cierta frescura a los suyos con los ingresos en ataque de Gonzalo Verón y Cecilio Domínguez, quien hacía su presentación en el Rojo tras convertirse durante este receso en la compra más cara de la historia del club (pagó seis millones de dólares por el 70 por ciento de su pase a América de México). Y el paraguayo aportó pinceladas en el inicio dominador del elenco local, que se adueñó de la pelota como siempre.

Sin embargo, ese alentador arranque de los de Avellaneda se topó con el infortunio a los 18, cuando un despeje de Fabricio Bustos dentro del área dio en la cara de Bruno Pittón y fue a parar al fondo de la red. Entre risas y dolor, el mayor de los hermanos festejaba lo que era el curioso 1-0 santafesino, quienes no habían hecho demasiados méritos por el momento.

El gol distrajo al dueño de casa, que empezó a enfocarse en el arbitraje de la mano de Pablo Pérez, quien tras dos partidos jugados desde su llegada recibió su primera amarilla. Por su parte, Unión iba de menor a mayor y lograba exhibir su aceitado funcionamiento defensivo. Pero parecía que era el partido de los goles raros porque, a los 41, un centro de Bustos por derecha se convirtió en el 1-1 cuando Gómez Andrade intentó despejar y la mandó en valla propia.

En la segunda parte, Independiente volvió a ser protagonista ante un Unión que con el correr de los minutos se mostraba más conforme con el punto de visitante. El primer aviso lo dio el uruguayo Gastón Silva, con un terrible tiro libre de zurda que obligó a una gran respuesta de Nereo Fernández. Pero recién a los 74 el Rojo pudo ponerse en ventaja. Tras un córner de Unión, Campaña salió rápido y nació una contra muy bien manejada por Domínguez –el mejor de los suyos– quien habilitó al ingresado Pablo Hernández, víctima de una infracción en el área. Del penal se hizo cargo el también ingresado Fernando Gaibor, quien definió con tranquilidad para poner el 2-1 final y brindarle, justamente eso, a un necesitado Holan.