Desde Brasilia
La periodista Eliane Cantanhede dijo ayer en radio Eldorado, del grupo Estado, que el presidente Jair Bolsonaro iba a “tomar la última dosis de quimioterapia” antes de dejar el Hospital Israelita Albert Einstein de San Pablo. El mandatario abandonó cerca del mediodía ese centro médico paulistano donde fue sometido a una cirugía el lunes 28 de enero. La intervención se prolongó por siete horas, cuatro más de lo previsto.
A partir de entonces los comunicados del Palacio del Planalto sobre su cuadro clínico despertaron dudas, incluso en la prensa conservadora. El diario Folha de Sao Paulo publicó que las versiones oficiales posiblemente no se ajustaban a la realidad.
El caso es que el paciente recibió el alta ayer, 16 días después de la operación, mientras la previsión inicial era que sería liberado entre siete y diez días después de pasar por el quirófano.
Ayer, poco después de las 12.30 horas, el portavoz presidencial, general Otavio Rego Barros, anunció la “buena noticia” del alta tras lo cual desmintió lo que llamó “fake news” sobre la situación del ex capitán Bolsonaro.
Dijo el vocero que “en ningún momento hubo ninguna sospecha preoperatoria o durante la internación en relación a un cáncer (...) los exámenes hechos reiteran la ausencia de esa dolencia”.
La información dada por la periodista Cantanhede, que también trabajó en Folha y el grupo Globo, repercutió en varios blogs progresistas.
El portal Brasil 247 evitó manifestarse sobre la veracidad de la noticia, pero mencionó que en la internación se generó una “polémica” en las redes sociales por las dudas sobre la veracidad del estado de Bolsonaro, que fue operado para retirarle una bolsa de colostomía que llevaba después de una puñalada sufrida en septiembre.
Por su parte el sitio Forum escribió, citando a la periodista Cantanhede, que Bolsonaro “tomaría” quimioterapia y linqueó el audio de su intervención radial. También en el portal Diario Centro del Mundo repercutió la noticia divulgada por radio Eldorado.