Con el testimonio en Cámara Gesell de A., la chica que tenía 14 años cuando fue ultrajada por el sindicado abusador serial Luis Marcelo Escobar, terminaron de declarar las 18 víctimas del hombre que se hacía pasar por policía para obligarlas a subir a un auto y llevarlas a zonas descampadas, donde las sometía. La chica llegó a sacarle una foto a la patente del auto. Todos los relatos lo describieron físicamente, hablaron del arma con la que muchas fueron amenazadas, de las palabras que usaba y que llevaba un handy. También fue común escuchar que les "arruinó" la vida y que las secuelas no se borraron. En el juicio, las mujeres de entre 14 y 25 años revelaron su historia de vida y cómo lo hechos cometidos entre 2014 y 2016 significaron un quiebre que no les permitió volver a ser ellas mismas. Fiscalía pide 50 años de prisión.

"Si alguna vez me cruzas por la calle ¿me vas a saludar?"; "Hacé lo que te digo o te van a encontrar con un tiro en un arroyo"; "No tengo que ser mujer para revisarte"; "Bajá tranquila que yo te miro". Las frases del acusado no fueron olvidadas por las víctimas que llegaron llorando a sus casa, tras los episodios de abuso. Incluso, M., una de las chicas violentada tiene tres hijos y ayer declaró que su pareja estaba en la casa cuando ella entró y que se enojó cuando le contó que había sido violada.

Muchas contaron también cómo fue el proceso tras la denuncia, que en las comisarías no recibieron buenos tratos, que no les creían, que si eran mayores no eran escuchadas, que tuvieron que revivir una y otra vez aquel momento. Sin embargo, cuando supieron que llegaba el momento del juicio a Escobar, acusado por la fiscal Carla Cerliani, ninguna dudó: todas reclaman que haya justicia y que el sindicado pague por lo que les hizo; pero sobre todo surge la necesidad de que nadie más pase por una situación como la que les tocó vivir: "Para que no le pase a otra chica", dijeron.

Ayer declaró también una psicóloga que atendió a una de las víctimas en un centro de salud. La profesional habló de los abusos como un episodio que "arrasa con todo" en la vida. También mencionó los sentimientos y síntomas que muchas de las jóvenes revelaron en el juicio, como la culpa, el miedo, la vergüenza y la sensación de suciedad, entre otros.

Cuando esta semana termine la producción de la prueba -con testimonios de profesionales y personal que trabajó en el caso-, la Fiscalía estará lista para dar los alegatos de cierre y se espera que la semana que viene se ponga fecha a la lectura de la resolución que estará a cargo del tribunal conformado por María Isabel Mas Varela, Patricia Bilotta y Mariano Aliau.