El banco suizo UBS fue condenado en un tribunal francés por práctica bancaria ilegal y blanqueo de capitales, por lo que deberá pagar una multa de 3700 millones de euros, la mayor impuesta en el país para este tipo de delitos. El Tribunal de Gran Instancia de París le impuso la pena que había sido pedida por la Fiscalía Nacional Financiera al término de dos semanas de deliberaciones en noviembre pasado, por haber creado un sistema de engaño fiscal que permitió evadir del fisco francés 10.000 millones de euros entre 2004 y 2012. Según la acusación, UBS aconsejaba a clientes franceses adinerados abrir cuentas en Suiza para pagar menos impuestos y quedar cubiertos por el secreto bancario que hay en ese país. UBS deberá, además, indemnizar con 800.000 euros al Estado francés, que reclamaba el doble. El banco suizo había sido condenado con anterioridad en otros países por hechos similares, aunque con penas inferiores: de 780 millones de dólares en Estados Unidos en 2009 y de 300 millones de euros en Alemania en 2014.