Una mujer de 22 años que vivió en la calle y fue víctima de violencia de género será llevada a juicio oral y público acusada de encubrimiento, ante un hecho de robo. Y. P. busca revincularse con sus cuatro hijos de entre seis meses y diez años, luego de que la Secretaría de Niñez interviniera en su caso, por la situación de falta de techo. Desde el año pasado se prepara con cursos de capacitación, para salir adelante, pero el fiscal regional Patricio Serjal se negó a darle una probation. La condena solicitada es de cumplimiento condicional y se estima que el juicio durará apenas un día. "Es un caso de criminalización de la pobreza y de violencia institucional; sin hablar del dispendio económico que hace el Estado para este juicio", protestó el defensor Francisco Broglia, del Servicio Público de la Defensa Penal. La ex pareja de la chica ya fue condenada en un juicio abreviado por el mismo hecho.
El suceso por el que la joven está acusada ocurrió el 29 de febrero de 2016. Fiscalía le achaca "parar un taxi para ir a lo de su hermano. Al llegar, vio que ella y un hombre empezaron a sacar cosas de atrás de una chapa" con un hombre al que un menor se refería como mamá y papá, según la acusación. El taxista interpretó que se trataba de un hecho de robo y paró un patrullero.
El coimputado en el expediente, de apellido Villagra, era pareja de mujer en aquel momento y quedó detenido. Fue condenado en un juicio abreviado a la pena de dos años de prisión en suspenso, por ese y otros hechos; mientras que para P. la Fiscalía pide dos años y medio.
"Es una chica que fue madre a los 14 años, está desempleada y su único ingreso con las asignaciones (AUH) por hijo. También denunció violencia de género por parte de Villagra, pero esa presentación sí fue desestimada rápidamente por la Fiscalía", se quejó Broglia.
La audiencia será hoy, a partir de las 8, y el juez Román Lanzón deberá resolver la suerte de la joven que ahora vive con su prima y un tío, mientras intenta una vida mejor para recuperar a sus hijos.
