Un grupo de conservacionistas lograron muestrear e identificar granos de polen y esporas fósiles de diferentes plantas y hongos que habitaron los alrededores de un pantano cerca de la localidad bonaerense de San Pedro, hace unos 700.000 años. El descubrimiento comenzó en junio de 2017 con el hallazgo de un grupo de armadillos gigantes o gliptodontes. Allí se lograron recuperar restos de tres ejemplares adultos y un juvenil en etapa de desarrollo; siendo este último uno de los ejemplares de la especie más completos que se conocen en Argentina.