La crisis deportiva en Central tuvo su réplica en la vida institucional del club. En desacuerdo con la desvinculación de Edgardo Bauza para conceder la dirección técnica a Paulo Ferrari, ayer presentó su renuncia el vicepresidente tercero Martín Lucero. El presidente Rodolfo Di Pollina intentó persuadir a Lucero para que revea la decisión por un pedido de licencia pero anoche ratificó  su dimisión a solo cinco meses de asumir.