La AMIA y la DAIA hicieron pública su “satisfacción” por la absolución del ex titular de la DAIA Rubén Beraja en la sentencia del Tribunal Oral en lo Criminal Federal (TOF) número 2 en la causa por el encubrimiento del atentado a la AMIA. Beraja estaba acusado de participar de las negociaciones para el pago de una coima de 400 mil dólares a Carlos Telleldín para que modificara su declaración y acusara a un grupo de policía bonaerenses. El TOF 2 dio por probado el pago de la coima, pero desligó a Beraja de las negociaciones. Las organizaciones judías mantuvieron su posición sobre la falta de pruebas respecto del pago de la coima y manifestaron su “disconformidad” por la condena contra el juez Juan José Galeano por ese delito.
“Demuestra que la dirigencia comunitaria actuó sujeta a derecho, e impulsando la investigación para llegar a la verdad”, celebraron AMIA y DAIA sobre la absolución de Beraja y ratificaron la posición mantenida durante la etapa de alegatos –en la causa las organizaciones tuvieron una querella unificada– respecto de que “nunca existieron pruebas para mantener la acusación” y consideraron que se trató de “una estrategia de querer convertir, a través de su persona y en su carácter de dirigente institucional, a las víctimas en victimarios”.
El ex titular de la DAIA llegó al juicio oral acusado como partícipe primario del delito de peculado por participar de las negociaciones con Telleldín para que modificara su declaración incriminando falsamente a ex policías bonaerenses en el atentado. Según había declarado Telleldín fue Beraja quien ordenó respaldar a Galeano en la estrategia para desviar la investigación. En una escucha telefónica realizada en abril de 1997, el prosecretario de Galeano José “Pepo” Pereyra recibió una llamada en la que le aseguraban que “el titular de la DAIA lo apoyó a Galeta (por Galeano)”.
Si bien absolvió a Beraja, el TOF 2 dio por probada la existencia del pago de la coima. Por ese delito condenó al ex juez federal Galeano, al ex titular de la SIDE Hugo Anzorreguy y ordenó que le decomise a Telleldín un equivalente a la coima recibida.
En ese aspecto, AMIA y DAIA manifestaron su “disconformidad por los delitos de peculado y privación ilegítima de la libertad que el Tribunal le atribuyó al ex juez Juan José Galeano, por considerar que no fueron probados durante el juicio”.