“Estamos dispuestos a pagar la inflación, no podemos pagar por arriba”, sentenció el presidente Mauricio Macri, con el propósito de marcar el techo del aumento salarial que el Gobierno espera fijarles a los gremios: debajo del 20 por ciento. Poco después de esas palabras, la CGT anunciaba las primeras medidas de fuerza del año. “Estamos propiciando la paritaria del Estado, después, cada sector privado hará su paritaria”, aseguró el Presidente. Eso sí, dijo que “entiende” el descontento de los sindicatos. Macri, quien había hecho campaña con la consigna de “Pobreza cero”, prometió ahora que de la pobreza se va a salir en 20 años. Además, sostuvo que no quiere que haya ministros que sean candidatos en las elecciones de este año.
Con la ruptura del diálogo con los gremios en ciernes, Macri se mostró duro con los trabajadores. “El Gobierno está dispuesto a pagar en términos de salario la inflación, porque si no, el déficit público va a ser peor”, aseguró. “Hay que entender que la Argentina tiene un problema severo, que es el nivel de pobreza, y una de las causantes de la pobreza ha sido la inflación”, aseguró Macri. No hubo autocrítica sobre el crecimiento de la pobreza durante su primer año de mandato.
Sobre la inflación, que también tuvo un nivel récord el año pasado, Macri sostuvo: “Nos hemos comprometido a reducirla. El último semestre fue menos del 9 por ciento y aspiramos este año a tener una inflación, en el año, debajo del 20 por ciento”. Se sabe que la promesa de “Pobreza cero” que hizo en la campaña ya quedó en el olvido. No obstante, ayer Macri le puso fecha al final de los pobres en la Argentina: “Hace falta crecer 20 años para sacar a todo los argentinos de la pobreza”, aseguró. “Hace falta crecer y se puede, si trabajamos de esta manera, juntos, escuchándonos, diciendo la verdad, comprometiendo cosas que sean cumplibles. Esa confianza es una fuerza arrolladora, que moviliza a todo un país, como lo está movilizando hoy; entonces espero que nos sigamos encontrando, para demostrar que las cosas a las que nos estamos comprometiendo se cumplen”, indicó en el barrio Nueva Esperanza de la capital de Santa Fe, donde estuvo acompañado por el gobernador socialista Miguel Lifschitz, el intendente radical José Corral y el titular del gremio de peones rurales, Gerónimo “Momo” Venegas.
El Presidente también se refirió a las inundaciones en esa provincia, las cuales comentó como si no tuviera responsabilidad: “El problema no se termina cuando el agua se va, al contrario, los problemas se quedan y ahí es cuando apreciamos con mayor claridad el dolor que nos provocan las consecuencias que tiene el agua. Detrás de cada inundación hay una vivienda que se pierde, hay una familia que sufre, hay un campo que se abandona, porque el agua arrasa con todos los medios de trabajo y eso ocasiona mayor pobreza, mayor frustración, por eso justamente cuando el agua se va es donde todos tenemos que encontrarnos en el terreno”, indicó.
Macri sostuvo que, en Santa Fe, “son décadas de obras de las cuales se habla y no se han hecho”. “Las obras no pueden nunca más comenzar y nunca terminar, las obras no pueden ser otra cosa que fuente de alegría, de esperanza, de futuro, nunca más sinónimo de corrupción, nunca más ligadas al robo, a la frustración, a la mentira. Las obras tienen que comenzar y terminar en los plazos que han sido comprometidas”, afirmó Macri, continuando con el tono de campaña.
El Presidente también expresó su preferencia porque sus ministros no sean candidatos esta año. “Yo priorizo mucho responderle a la gente. Yo preferiría que se queden todos en sus tareas. Necesito que haya velocidad en la resolución de los problemas”, sostuvo.
Macri aprovechó que compartía el acto con Corral, titular de la UCR, para comentar que le gustaría que compita en las elecciones santafesinas. “Tiene un enorme compromiso como intendente de Santa Fe, pero la verdad que sería bueno para Cambiemos en Santa Fe que él asumiese ese rol pero todavía no se habló”, afirmó.
El Presidente no se mostró muy proclive a que haya primarias para definir los candidatos de la alianza electoral, aunque tampoco cerró la puerta: “Depende el lugar, la situación, las PASO son una herramienta, puede ser que sirva para dilucidar cuál es el candidato que tiene más apoyo para representar a Cambiemos en cada distrito. No hay que estar cerrado”.