Parecía que el París Saint-Germain tenía cerrada la serie ante el Manchester United tras el 2 a 0 en su visita a Old Trafford. Sin embargo, en el Parque de los Príncipes de la capital gala se consumó una hazaña memorable: el United ganó 3 a 1 y la mayor cantidad de goles de visitante le dio el pasaporte a cuartos de final.
Lukaku abrió la cuenta para el Manchester a los dos minutos de partido y renacían las esperanzas de los Diablos Rojos, que hoy vistieron de blanco. Las ilusiones se volvieron cuesta arriba cuando Bernat igualó a los 12 minutos. En ese momento, los ingleses necesitaban dos goles. Lukaku volvió a marcar a los 30, y así se fueron al descanso.
En el complemento, el United se dedicó a buscar el gol que hiciera el milagro, ante un PSG que apostó al uruguayo Cavani como opción de gol y extrañó al lesionado Nymar, quien siguió el partido desde un costado.
Así llegó el último minuto. Parecía que se consumaba el pase a cuartos de los franceses. Pero un penal cambió todo. Un remate rebotó en la mano extendida de Kimpembe. Tras consultar el VAR, el árbitro cobró la pena máxima. Rashford se paró frente a Gainluigi Buffon y certificó la remontada. Se jugaron cinco minutos más, pero la alegría fue toda inglesa.
Para el PSG significa una nueva frustración a nivel continental. Propiedad del jeque catarí Nasser Al-Khelaifi, todos los años invierte millones y millones de euros que según la UEFA atentan contra el fair-play financiero. Sin embargo, las cifras estratosféricas para armar equipos competitivos no se traducen en logros deportivos fuera de Francia. Dos años atrás, el Barcelona le remontó cuatro goles en octavos de final y el año pasado no pudo llegar a semifinales.
