Las estudiosas feministas de la década del 70 iniciaron un camino de reflexión de los supuestos teóricos y metodológicos sobre los que se asentaban por entonces las ciencias sociales. Decididas a explicar la opresión de las mujeres, aquellas militantes llegaron a la conclusión de que los cuerpos teóricos o bien no trataban la desigualdad entre varones y mujeres o bien la justificaban; que no había una historia al respecto que mostrara la génesis y desarrollo de la dominación y predominio de los varones.
Con este antecedente, a principio de los 90 se crea en la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de Rosario un Centro de Estudios sobre las Mujeres que se ocupa de la formación, investigación y difusión de las problemáticas de género y poder en nuestra sociedad y posibilitan desarrollar un pensamiento crítico y alternativo al establecido por el sistema patriarcal y heteronormativo.
Fue fundado por la reconocida investigadora Hilda Habichaín, profesora en las Facultades de Psicología, Ciencia Política y Humanidades, quien tuvo un temprano interés por el estudio de la situación de las mujeres en la sociedad. Sus proyectos abordaron problemáticas desde la violencia doméstica, la maternidad, la prostitución, la salud, las sexualidades, la educación y socialización, el trabajo, el derecho y la política, sobre los que publicó numerosos artículos y libros durante toda su vida.
En un principio el espacio se llamó Centro de Estudios Históricos sobre las Mujeres y agrupó a docentes e investigadoras que tenían interés en visibilizar y rescatar el rol de las mujeres en los diferentes momentos históricos. Una de sus primeras actividades fue las "reuniones de los viernes". En aquellos encuentros se socializaban las producciones científicas e incluso se vinculaban con otros centros de estudios y universidades a través de libros, anuarios y revistas. Cabe destacar que este espacio no sólo nucleaba a académicas sino también a mujeres referentes feministas de las luchas de los 70.
A mediados de los 90 el centro decide ampliar su perspectiva disciplinar llamándose a partir de entonces Centro de Estudios Interdisciplinarios sobre Mujeres (CEIM) con el fin de incorporar a otras profesionales abogadas, antropólogas, psicólogas, trabajadoras sociales, sin dejar de estar las historiadoras, que ya venían participando. El primer proyecto que realizan tenía como objetivo investigar la pobreza y la vulnerabilidad social en mujeres de sectores populares a partir de la aplicación del modelo neoliberal, haciendo un estudio comparativo en dos barrios de la ciudad de Rosario: El Saladillo y Empalme Graneros.
Luego de los primeros años de trabajo se consolida un enfoque epistemológico común al interior del centro. Se pasa de pensar "la mujer" a "las mujeres" y de las mismas al "género", ya no como estudios de especialización histórica sino como una problemática interdisciplinaria, integral y relacional, que está atravesada por la realidad sociocultural, la clase y la historia, el sistema económico y político, las etnias y las religiones.
La maestría "Poder y sociedad desde la problemática de género", iniciada en 1993, es referente para investigadoras a nivel nacional e internacional.
La Maestría
En el año 1993 se inicia la maestría "Poder y sociedad desde la problemática de género", la primera en América Latina sobre estudios de género, siendo un referente a nivel nacional e internacional en la coordinación y fomento de investigaciones sobre género y mujeres. A lo largo de estos años de existencia y dictado ininterrumpido, ha recibido a estudiantes de España, México, Brasil, Colombia y de distintas ciudades de nuestro país.
Lo distintivo de esta maestría es su interdisciplinariedad ya que los estudios de género refieren a problemas transversales que superan un único enfoque. Esto permitió que no sólo sea un espacio de formación de estudiantes de la maestría sino también para militantes feministas, instituciones, profesionales y personas interesadas en la temática.
Actualmente, la están cursando profesionales de derecho, psicología y docentes de todos los niveles porque "hay una demanda tanto en organismos del Estado como en el sector privado de crear áreas de género y necesitan una formación al respecto", afirma la Secretaria Técnica de la carrera, María Mercedes Moreno. El promedio histórico fue de 20 inscriptos pero en 2018 se anotaron más de 60, es decir que se triplicó la cantidad de alumnos. Los seminarios abordan temáticas como educación sexual integral, interrupción del embarazo, militancia y feminismo, políticas del cuidado y relaciones de género.
En la década del 90 comenzaron a publicar anualmente la revista "Zona Franca" con la participación de reconocidos investigadores, que lleva editados 26 números, los últimos en versión digital (link). Asimismo, disponen de un Centro de Documentación de Género y Feminismo con una profusa bibliografía de más de 2000 volúmenes formado por libros, revistas, folletos, artículos periodísticos, legislaciones, documentos internacionales, programas sobre políticas públicas y tesis de la maestría.
Entre los proyectos de investigación realizados se encuentra: "Incidencias del género en las transformaciones urbanas: ciudad, familia y arte", cuyo objetivo fue conocer, describir y analizar cómo las transformaciones que se produjeron entre fines del siglo XX y principios del XXI incidieron en la visibilización de las mujeres en la ciudad de Rosario. Para ello estudiaron el ámbito del accionar político, las relaciones al interior de los grupos familiares, la generación de políticas públicas, el campo artístico.
Asimismo, tuvo lugar un proyecto de voluntariado universitario denominado "GENERando conexiones. Aportes desde el feminismo y el concepto de género al uso y acceso responsable de las Tics". El mismo consistió en la realización de talleres con docentes y estudiantes de cuarto año del secundario para abordar las relaciones de género en sus distintas formas: roles sociales, patriarcado, diversidad, derechos sexuales y reproductivos.
Actualmente se está llevando a cabo una investigación para dar cuenta de cómo se implementó y qué lugar ocupa hoy la Ley nº 26150 de Educación Sexual Integral en las escuelas de la ciudad. El estudio, denominado "El género en las políticas públicas: proceso sociopolítico de participación y construcción de ciudadanía en los campos de la salud y la educación en la ciudad de Rosario" está a cargo de un grupo de antropólogas, politólogas y psicólogas del Centro.
Las nuevas generaciones de mujeres investigadoras realizan actividades de capacitación en espacios formales e informales, voluntariados universitarios así como trabajos de extensión en escuelas, centros comunitarios y bibliotecas populares. Es decir que esta labor trasciende las fronteras de la Universidad para generar espacios de reflexión y concientización en diferentes sectores de la sociedad.