El juez federal de Santa Fe Francisco Miño suspendió las indagatorias que debían empezar ayer a los 19 ex directivos del Mercado de Valores del Litoral investigados por la Procuraduría de  Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac) como supuestos "cómplices primarios" de la megaestafa del financista Mario Rossini. Esta semana estaban citados el ex ministro de Economía José María Candioti y dos allegados al intendente José Corral: su ex secretario de la Producción, Pablo Tabares (foto) y el contador Germán Huber, ex presidente del Tribunal de Cuentas de la provincia hasta 2018, pero zafaron. Miño suspendió la ronda ante un pedido de la defensa que consideró "atendible", pero que las querellas y la Fiscalía interpretan como una "maniobra dilatoria" para empalmar con la prescripción de la causa. El operativo tuvo tres etapas: 1) La defensa planteó la nulidad de una prueba clave (el informe de Procelac) y del dictamen fiscal que pidió las indagatorias. El juez lo rechazó, pero concedió la apelación ante la Cámara. 2) La defensa pidió la nulidad del llamado a indagatorias que había ordenado el juez. Miño lo rechazó porque no era apelable. 3) La defensa pidió entonces la suspensión de las indagatorias y ahora sí, el juez le hizo caso y suspendió las audiencias porque -a su juicio- la solicitud era "atendible".