A pesar de tener asegurada su reelección en junio en París, Gianni Infantino apostará fuerte mañana en la reunión del Consejo de la FIFA en Miami, donde pretende implementar su polémico proyecto del ampliado Mundial de Clubes. El torneo pasaría, cada cuatro años a partir de 2021, a reunir un total de 24 equipos. También sobre el tapete estaría la ampliación del Mundial a 48 selecciones, ya desde Qatar 2022, aunque actualmente solo esté prevista para 2026. El presidente de la FIFA, quien ya tuvo que echar el freno en octubre durante un Consejo en Kigali, se presenta a la reunión de Florida con algunas noticias tranquilizadoras de cara a convencer a los indecisos, incluso a su escasa oposición.
La decisión principal, el descarte, al menos por ahora, de una asombrosa inversión de 25 mil millones de dólares (21,9 mil millones de euros) para el proyecto del Mundial de Clubes ampliado. La propuesta, originaria de un fondo anónimo cuya procedencia diversas fuentes sitúan en Asia y Medio Oriente, suscitó numerosas críticas, principalmente del jefe de la UEFA, Aleksander Ceferin.
El esloveno señaló la opacidad en la gestión del proyecto por parte de Infantino, y también teme que el renovado Mundial de Clubes, incluso aunque se juegue solo cada cuatro años, se revele una amenaza para la Champions League, auténtica gallina de los huevos de oro de la UEFA.
¿Principio de acuerdo? En el apoyo de la mayoría de las seis confederaciones, Infantino, quien también dejó de lado su proyecto de una Liga Mundial de Naciones, podría tener que contentarse con un principio de acuerdo en Miami, y esperar una decisión final en la próxima reunión del Consejo, en junio próximo en París.
Otro motivo de discordia sigue siendo la distribución de los ingresos entre clubes y confederaciones. La FIFA anteriormente favorecía una distribución del 75 por ciento para los clubes, y del 25 por ciento para las confederaciones, y estaría ahora más dispuesta a una partición igualitaria.
¿Cuarenta y ocho equipos en Qatar? Otro tema en la agenda es el paso del Mundial a 48 equipos, a partir de la edición de 2022 en Qatar. La ampliación del cupo, que por ahora solo se vislumbra para 2026, aumentaría el calendario de 64 a 80 partidos, y requerirá que algunos encuentros se disputaran fuera del país organizador.
En un intento por convencer a los escépticos, un estudio de viabilidad realizado por la FIFA asegura que este gran formato garantizaría “ingresos adicionales de entre 300 y 400 millones de dólares (entre 265 y 354 millones de euros)”, de los cuales 120 millones de dólares adicionales relativos a derechos de televisión, 150 en derechos de comercialización y 90 en venta de entradas.
Otro obstáculo, este de naturaleza geopolítica, reside en el actual bloqueo impuesto por Bahrein, Egipto, Arabia Saudita y los Emiratos Arabes Unidos a Qatar. La disputa de partidos en un país vecino “implica el levantamiento de este bloqueo, en particular el levantamiento de restricciones sobre el movimiento de personas y bienes”, destaca el estudio de viabilidad, del que la agencia AFP obtuvo extractos.
Por otro lado, la justicia interna de la FIFA ha sancionado a Rafael Salguero, ex presidente de la Federación Guatemalteca de Fútbol (Fedefut), al considerarlo culpable de soborno y reventa ilegal de entradas, anunció el organismo en un comunicado. Salguero ha sido sancionado con un período de siete años apartado de cualquier actividad futbolística, así como con una multa de 100 mil francos suizos (misma cantidad en dólares).
La Cámara de Etica de la FIFA encontró a Salguero, ex miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA y de la Concacaf, culpable de varios sobornos “durante el período de 2006-2014 relacionados con las competiciones Concacaf y FIFA, así como la reventa ilegal de boletos para la Copa Mundial de la FIFA”.
Es la última de las sanciones recibidas por ex dirigentes del máximo organismo del fútbol mundial, relacionada con el vasto escándalo de corrupción que afectó a la FIFA en 2015, y que acabaría provocando la caída del expresidente Joseph Blatter en octubre de ese año.