El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, exigió ayuda a la ONU así como a sus países aliados Cuba, China, Irán y Rusia para investigar el presunto ciberataque que causó un masivo apagón en el país el jueves pasado y duró varios días. Por su parte, China respondió de inmediato y se puso a disposición del gobierno de Maduro para ofrecer ayuda y asistencia técnica. “Nombré una comisión de investigación especial del ciberataque y pedí la incorporación de especialistas internacionales. Voy a pedir el apoyo de la ONU, y además el apoyo, ya activo, de Rusia, China, Irán y Cuba”, dijo el mandatario en cadena nacional.
Según explicó Maduro, al frente de la comisión estará la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, quien estará acompañada por el fiscal general, Tarek Saab, y científicos locales. “Vamos a desgranar para que ustedes sepan cómo fue el ataque, hemos descubierto muchas cosas, ya yo sé muchas cosas, solo puedo decir que se dirigió desde Houston y desde Chicago, desde dos ciudades de Estados Unidos”, denunció Maduro.
Ante su pedido a la ONU, la entidad internacional respondió ofreciendo ampliar su ayuda. Si bien una delegación de la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU, Michelle Bachelet, está trabajando desde el lunes en Venezuela en la investigación de delitos contra los derechos humanos, a partir de hoy se pondrán en contacto con funcionarios venezolanos para abordar las secuelas que dejó el apagón. La falla ocurrió en la central hidroeléctrica de Guri, la principal del país y responsable de abastecer de energía a cerca de 70 por ciento de Venezuela. Desde un principio, el Palacio de Miraflores responsabilizó a Estados Unidos y a la oposición local que no tardó en desentenderse del tema. En su alocución presidencial, Maduro explicó que la instalación fue atacada de manera cibernética, mientras que las líneas de transmisión padecieron sabotajes electromagnéticos y físicos mediante el uso de tecnologías que, aseguró, solo tiene Estados Unidos. En esta línea, ayer respaldó la decisión de la Fiscalía de abrir una investigación contra el jefe del Parlamento y autoproclamado presidente interino, Juan Guaidó.