Parece un videojuego. Pero no lo es. Es la transmisión en vivo por Facebook de una masacre realizada en la mezquita Al Noor de la ciudad de Christchurch, Nueva Zelanda. Filmada desde la óptica del tirador, muestra cómo ametralla a decenas de personas.
También fue atacada otra mezquita de Christchurch, la de Linwood, provocando más muertos y heridos. Entre ambos ataques la policía reconoció que hay 49 muertos y 20 heridos graves. Fueron detenidos tres hombres y a una mujer los incluido el atacante de la mezquita Al Noor, identificado como Brenton Tarrant, de 28 años, nacido en Australia, un ex personal trainer sin antecedentes penales. Cayó tras una persecución por las calles de Christchurch. Su auto estaba cargado de explosivos. Uno de los detenidos fue liberado a las pocas horas al comprobarse que era ajeno a los hechos. Al cierre de esta ediciónnoquedaba claro si hubo un segundo tirador en Linwood o si Tarrant cometió ambos atentados.
Mohammad Jama estaba en la mezquita Masjid Al Noor cuando el atacante empezó a disparar. “Cualquiera que él pensara que seguía con vida, recargaba y disparaba de nuevo. No quería que nadie quedara vivo”, dijo Jama a la Radio Nueva Zelanda. El comerciante Carl Pomare pasaba delante de la mezquita cuando terminaba el ataque. “Había una niña pequeña, de unos cinco años, a ella le habían disparado, y a su padre también. Logramos subir a la niña a un auto antes de que llegara la ambulancia, estaba en estado crítico,” contó.
La primera ministra Jacinta Ardern aseguró en una inmediata conferencia de prensa que era “uno de los días más oscuros en la historia de Nueva Zelanda”. “Este tipo de violencia no tiene lugar entre nosotros. Esto no es lo que somos. Ha ocurrido en un lugar donde la gente debería haber estado expresando libremente su libertad religiosa, donde deberían haber encontrado en un entorno seguro, y eso no ha ocurrido”, afirmó la primera ministra.
El atacante estaba vestido con ropa militar y un casco, donde llevaba la cámara con la que registró su acción. Habría utilizado tres armas semiautomáticas y dos escopetas en su ataque, todas compradas legalmente en los últimos dos años. El video se inicia cuando Tarrant sube a su auto y muestra todo el viaje hacia la mezquita. Al llegar estaciona en una calle lateral y toma del baúl el arma automática, cubierta de inscripciones en blanco, con la que concretaría la masacre. El primer disparo impacta en la espalda de un hombre en la puerta de la mezquita de Al Noor, donde había por lo menos 200 personas en ese momento, y luego el atacante va desplazándose por pasillos y salas, donde dispara a mansalva sobre los presentes.
Se puede ver como el hombre recarga su arma y vuelve a recorrer las salas para rematar a los heridos. Cuando finalmente sale, dispara varias veces a blancos inidentificables antes de matar a una mujer camino a su auto.
Todo el video dura aproximadamente 17 minutos y genera una profunda sensación de espanto al observarlo, quizás porque el punto de mira lo asimila a los más difundidos videogames.
Aunque se viralizó enseguida, los especialistas reclamaron que sea quitado de las redes sociales. Expertos en psicología recomendaron no verlo, sobre todo evitar que lo vean los niños, y Facebook lo bajó casi de inmediato. Igual siguió su recorrido por Youtube, hasta que horas más tarde imitó Facebook. Tanto Twitter como Reddit también eliminaron contenidos relacionados a la masacre de sus plataformas. Varios medios locales e internacionales difundieron un supuesto manifiesto del homicida cuyo contenido lo vincula al supremacismo blanco y el odio a los musulmanes. El documento de 74 páginas, llamado “El gran reemplazo”, define a los islámicos como “invasores”. El título parece hacer referencia a una tesis del escritor francés Renaud Camus sobre la desaparición de los “pueblos europeos”, “reemplazados”, según él, por poblaciones no europeas migrantes. El texto asegura que la masacre busca “reducir directamente el número de inmigrantes hacia territorios europeos (sic) por medio de la intimidación y la remoción física”. Del propio autor, asegura que “solo soy un hombre blanco común, de una familia normal que ha decidido tomar una postura para asegurar el futuro de su gente”. Declara que los momentos claves de su radicalización fueron el fracaso de la dirigente ultraderechista Marine Le Pen en las elecciones francesas de 2017 y un ataque con camión que causó cinco muertos en Estocolmo en abril de 2017, entre ellos una niña de 11 años.
Las inscripciones que aparecen en las armas del atacante, y que se pudieron ver en el video, también habían sido publicadas antes desde la misma cuenta de Twitter donde se difundió el manifiesto. Este es el último tuit publicado por esta cuenta antes de su suspensión.