Con la presencia de más de doscientas mujeres de distintas organizaciones nucleadas en las centrales obreras, quedó conformado el Espacio Intersindical de Investigación con perspectiva de género. La iniciativa tiene como objetivo “construir conocimiento para la batalla por una sociedad más equitativa” y llevar con fuerza, al seno de la CGT, la CTA y la CTA Autónoma, “la experiencia y la postura del movimiento de mujeres que desde hace años viene marcando rumbos en la lucha por la equidad y la igualdad de oportunidades”. En la presentación, que se hizo en la sede de la UMET (Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo), las mujeres se convocaron a trabajar juntas en sus sindicatos para generar “instancias que permitan posicionar el punto de vista de las militantes de estas organizaciones en el debate público y desarrollar investigaciones y estrategias de formación y capacitación que permitan fortalecer las secretarías vinculadas con la equidad de género”.
En la mesa estuvieron Estela Díaz, secretaria de Género de la CTA; Dora Martínez, de la CTA Autónoma, y Claudia Ormaechea, de la Asociación Bancaria, alineada con la CGT en la Corriente Federal, entre otras dirigentes. La apertura estuvo a cargo de Cecilia Cross, secretaria de Investigación de la UMET, quien destacó que la presencia de representantes de las tres centrales de trabajadorxs, “junto a compañeras del Citra (Centro de Innovación de los Trabajadores)”, lo que demuestra que “hacemos este acto de presentación para que sea una oportunidad y una convocatoria abierta a las trabajadoras de todas las expresiones del movimiento obrero y la economía popular”. Las actividades comenzarán en unas dos semanas, para darles la posibilidad a otras organizaciones sindicales de sumarse a la iniciativa. Podrán hacerlo comunicándose por mail a [email protected].
La apertura del espacio es para “construir otro modo de producir conocimiento, con la palabra de las trabajadoras como protagonistas”, con la meta de “enlazar la práctica política sindical con la producción de conocimiento”. Algunos de los objetivos son crear un observatorio para “desarrollar datos que den visibilidad a nuestras principales problemáticas”, realizar “investigaciones que pongan foco en nuestras organizaciones y nosotras dentro de ellas” y elaborar “estrategias de formación para el mundo en el que vivimos y el que soñamos construir”. En la reunión quedaron conformadas las comisiones que trabajarán en tres aspectos: el Observatorio, el área de Investigación y la de Formación.
Desde el Observatorio se producirán informes cada 45 o 60 días para “enriquecer el debate sobre la posición de las mujeres en el campo laboral y de la lucha sindical”, en base a la experiencia del Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET). En Investigación, la propuesta es “configurar una agenda propia de temas y preguntas que permitan hacer un diagnóstico y trazar objetivos para mejorar la gestión de las secretarías de género de cada organización”. El área de Formación fue pensada como “un ámbito de ajuste de estrategias didácticas en base a nuestras experiencias, exitosas y fallidas, para abordar en sindicatos y lugares de trabajo la diversidad de temas que nos convocan, como la posición de la mujer en el sindicato, la política y el trabajo, la diversidad sexual y otros que puedan surgir”.
Para Dora Martínez, el que se ha formado “es un espacio deseado para que se articulen los saberes construidos desde las organizaciones”. En su intervención, Claudia Ormaechea, secretaria de Derechos Humanos, Género e Igualdad de la Bancaria, consideró en forma coincidente que se trata de “un espacio conformado con la idea de que sea un ámbito necesario para profundizar el trabajo que se viene dando en los sindicatos”, en torno de los derechos postergados de la mujer trabajadora.
Estela Díaz, de la CTA de los Trabajadores, dijo que el Espacio Intersindical constituye “un enorme desafío en todos los ámbitos laborales”, motivo por el cual llamó a “construir para lograr (en las próximas elecciones de octubre) la derrota del neoliberalismo en Argentina, el liberalismo que nos hambrea y endeuda”. Allí se escuchó una de las grandes ovaciones, aunque todas las intervenciones fueron muy aplaudidas.
Otras oradoras criticaron la forma en que los medios hegemónicos tratan todo lo relacionado con la internación en Cuba de Florencia, la hija de la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. En una de las intervenciones se condenó “a los canallas y las canallas (de los medios hegemónicos) que están diciendo que Cristina está haciendo un uso político de la enfermedad de su hija”. La mención fue acompañada luego por un deseo que también recibió un apoyo especial: “Debemos seguir trabajando juntas porque una mujer vuelva a ser presidenta en las elecciones de octubre”.
Aunque no pudo asistir por estar realizando otras actividades acordadas previamente, envió su mensaje de adhesión, leído en el acto, Noé Ruiz, secretaria de Igualdad de Oportunidades y Género de la CGT, quien expresó su apoyo y valoración “por la importancia de esta sinergia fundamentada en la unidad para la producción de conocimiento que acompañará la lucha de las trabajadoras” en todo el país. También estuvieron presentes representantes de ADEF-Docentes Curriculares, Agtsyp (Metrodelegados), APL, ATE Capital, Cepetel, Conadu, Ctera, Foetra, Pecifa, Sacra, Sadop, Sanidad, Satsaid, Suteba, Sutepa, Suterh, Uolra y UTE, entre otras.
En el acto habló también una representante de la Unión Obrera Ladrillera de la República Argentina (Uolra), un gremio que ha denunciado que sus afiliados son “tratados como esclavos” en sus lugares de trabajo. La mujer señaló que en la actualidad “somos muchas las que hoy realizamos este trabajo”, siempre considerado como un empleo sólo para hombres. Agregó que “no sólo estamos trabajando las mujeres sino que hay muchos niños que hacen ese trabajo, a pesar de las normas que prohíben el trabajo infantil”.
Diana, de UTE, habló en el final del encuentro para contar la situación de la comunidad travesti y trans. “Yo pude terminar la secundaria de grande, con la ayuda de mis compañeras docentes, y después pude terminar una carrera terciaria, lo que me permite hoy trabajar en una escuela, y mejorar mi situación”. Aclaró que no era su intención “hacer una referencia a mi situación personal, sino sólo para poder hablar de que las compañeras de mi comunidad no tienen la misma suerte que yo, porque el 90 por ciento de ellas sólo puede sostenerse a través del trabajo sexual, un trabajo que ninguna de nosotras realizamos porque queramos hacerlo, sino porque no tenemos más alternativas que salir a la calle o a las rutas”.
Diana, que se identificó como peronista, señaló que “el trabajo es lo que nos puede hacer libres, lo que nos permite defender nuestros derechos, por eso nos parece que una solución para el problema de nuestra comunidad es que se voten leyes que nos abran el camino al trabajo y les pido a todas ustedes, mis compañeras, de corazón, que nos ayuden a lograrlo”. El de Diana fue uno de los mensajes más aplaudidos de la reunión.