“Yo no he encontrado ningún programa (de gobierno) que esté dispuesto a reparar con justicia el daño histórico que ha recibido mi comunidad y esto me pasa en mi país, en Latinoamérica y en el continente europeo”. En su primera visita a la Argentina, en su carácter de activista social por los derechos de afrodescendientes, el actor estadounidense Danny Glover recalcó que “la segregación comenzó con los conquistadores, con la colonia, pero grandes pensadores que han analizado el tema y que se han pronunciado a comienzos del siglo XXI, han coincidido en que la situación sigue siendo la misma, en todos los países del mundo y contra eso es necesario seguir luchando”. Glover participó, junto con otras personalidades, en un encuentro que se realizó en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET), con motivo de la conmemoración, el 21 de marzo, del Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial.
Glover sostuvo, en distintas intervenciones a lo largo de una jornada de trabajo e intercambio, que “la discriminación racial en el mundo no es algo que sólo le afecta a los afrodescendientes en todo el mundo, sino que también afecta a los asiáticos, a los latinoamericanos que llegan a mi país y se manifiesta con crudeza por cuestiones religiosas en todo el mundo”. El actor llegó al país en su carácter de embajador oficial de buena voluntad de la Década Internacional para los Afrodescendientes de las Naciones Unidas. En la UMET, Glover recibió la distinción de Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires que le otorgó, por unanimidad, la Legislatura porteña. El diploma le fue entregado por el diputado porteño Ignacio Roberto.
En el acto central, donde se anunció la creación del Núcleo de Estudios Afrolatinoamericanos y de la Diáspora Africana y un programa de becas de la UMET para estudiantes afrodescendientes, se proyectó también la película Zama, sobre la esclavitud de los pueblos originarios durante la época colonial, con la presencia de su directora, Lucrecia Martel. Glover llegó al país acompañado por James Early, destacada personalidad de la comunidad afroestadounidense, miembro del consejo del Institute for Policy Studies. Tanto Glover como Early coincidieron en señalar la serie de actos de violencia y de políticas racistas en todo el mundo.
Early precisó que las políticas racistas “se denotan dentro del Partido Republicano, en contra de los propios republicanos, o cuando Donald Trump propicia leyes antilatinoamericanas para los residentes y nosotros aceptamos esas políticas, pero también cuando el actual presidente de Brasil (Jair) Bolsonaro en un país con cientos de millones de afrobrasileños, lanza sus ataques contra las religiones africanas, utilizando a los fundamentalistas de las iglesias protestantes o asesinando en las favelas a siete afrobrasileros cada día. Estamos viviendo una explosión de racismo en todo el mundo”. Agregó que esa situación se vive también en Europa “de mano de los gobierno derechistas y fascistas”.
En los encuentros que mantuvo con referentes de los organismos de derechos humanos, sectores políticos y gremiales, Danny Glover se manifestó como “ferviente defensor” de los sindicatos estadounidenses. En sus intervenciones, el actor-militante volvió a manifestar su apoyo y el interés por los gobiernos de Cuba y Venezuela, y su condena a las trabas que su gobierno le ha impuesto históricamente a esos dos países. Glover y Early coincidieron en que “se están viviendo momentos de suma gravedad en el mundo y para contrarrestarlos es necesario promover la educación, la salud y la lucha coordinada contra todo tipo de racismo”.
Al recibir la distinción que le entregó la Legislatura, Glover recordó que él, muchos años atrás, fue el primer afrodescendiente en recibir una reconocimiento de la Oficina de las Comunidades del gobierno de San Francisco. Con una sonrisa, dijo que ahora le iba a mostrar a las actuales autoridades nacionales de su país la condecoración recibida en Buenos Aires, lo que provocó su sonrisa y el aplauso del auditorio que concurrió al teatro que funciona en la planta baja de la UMET. Antes, Glover también se había sorprendido de que todos los legisladores votaran por distinguirlo: “Seguro que se equivocaron y pensaron que era Mel Gibson”, bromeó.