Unas 17 personas debieron ser internadas, tres de ellas en grave estado, luego de que un desperfecto mecánico dejara al crucero noruego Viking Sky a la deriva en medio de un gran oleaje, cerca de la costa de Hustadvika, al norte de Noruega. Casi 500 pasajeros tuvieron que ser rescatados, de las 1.300 personas a bordo, después de momentos de pánico donde el barco se bamboleó entre olas de gran tamaño. Del operativo de rescate participaron barcos y helicópteros. La embarcación llegó al puerto de Molde, al norte del país nórdico, después de ser remolcado.
Hasta el momento de iniciarse el operativo de remolque habían sido trasladados a tierra 463 personas de las 1.300 que estaban en el barco. Entre ellas, 17 fueron hospitalizadas. Según informó la televisión pública de Noruega se encuentran en estado grave sólo tres personas. La alerta de que el barco se encontraba en dificultades llegó a las autoridades marítimas noruegas a las 13 del sábado, al reportarse problemas en los motores.
A partir de ese momento se articuló en tierra un operativo de rescate para el que se preveía la intervención de varios barcos y helicópteros. Cuatro horas después de haberse iniciado la evacuación comenzaron a rescatar grupos de entre 10 y 15 pasajeros. La operación de rescate empezó ayer y se complicó por el fuerte oleaje y vientos de consideración.
El Viking Sky había enviado una señal de socorro por problemas en un motor, cuando se encontraba a unos cinco kilómetros de la costa de Hustadvika. A media mañana del domingo, los servicios de emergencia informaron que tres de los motores del barco se habían logrado reactivar, por lo que el crucero empezó a navegar de nuevo por sí mismo.
El barco realizaba el trayecto entre Tromso y Stavanger con 1.373 personas a bordo, 915 pasajeros -en su mayoría de Estados Unidos y Reino Unido- y una tripulación de 458 personas.