"Rosario necesita gente de experiencia y trayectoria para ser conducida, son momentos para dar la cara y así poder enfrentar los flagelos que quedan en la ciudad", afirmó el precandidato a intendente por Cambiemos, Jorge Boasso, apuntándole sin disimular al concejal Roy López Molina, su competidor en la interna del próximo 28 de abril. "Entendemos que en esta ciudad hay que poner orden, no existe el control, en nada, y esto termina perjudicando a los que menos tienen", consideró el ex edil radical, quien por otra parte culpó a los sucesivos gobiernos socialistas por la problemática al señalar: "Nunca se anticiparon a los problemas, siempre están detrás de los acontecimientos".
En diálogo con Rosario/12, Boasso confió que la intendencia es un sueño que siempre quiso alcanzar en su vida política y que en esta oportunidad se dio porque "hasta cuatro días antes del vencimiento de las presentaciones de las listas, Cambiemos no sabía quién iba a ser el candidato a intendente, Roy había desaparecido para sorpresa de propios y extraños. Así fue que muchos correligionarios pensaron en mí porque para liderar Rosario se necesita alguien con experiencia, administrarla es más difícil que 17 provincias".
El ex concejal radical, quien ocupó una banca en el Palacio Vassallo durante 20 años, y que ya compitió en una interna a la intendencia, la del Frente Progresista en el 2011 cuando perdió con Mónica Fein, precisó que la ciudad figura en el tercer lugar del país en cantidad de villas de emergencias, que en 30 años pasaron de 88 a 173, y que tiene 16 homicidios cada 100 mil habitantes, mientras que la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Córdoba tienen 5 y 3 respectivamente. "No me vengan con ese verso de que la inseguridad está en todo el país, pero con estos números, Rosario está triplicando la media nacional por la incapacidad del gobierno socialista, que nunca se anticipó a los problemas, siempre está detrás de los acontecimientos", indicó.
Según Boasso, "una ciudad que tiene que enfrentar la narco criminalidad, que tiene a más del 20 por ciento de la población viviendo en total marginación social, porque el socialismo se va a ir después de más de 30 años con más del doble de villas emergencias, con un transporte que sigue teniendo el mismo modelo de toda la vida, necesita que la conduzca alguien con experiencia". Para el precandidato de Cambiemos, conducir Rosario "no es un juego para chicos, no es cuestión de esconderse ante el primer obstáculo, de desaparecer por capricho. Si supero la interna nos vamos a convertir en una opción muy fuerte".
Si llega a la intendencia, lo primero que hará es llamar a las fuerzas de seguridad nacionales para combatir la narcocriminalidad.
El ex edil radical dijo que en caso de llegar a la intendencia convocará a todas las fuerzas políticas, pero lo primero será llamar a las fuerzas de seguridad nacionales para combatir la narco criminalidad. "Tienen que estar presentes todo lo que sea necesario hasta el combate final", planteó.
Boasso consideró que los radicales tienen, a partir de la caída ostensible del macrismo en la consideración del electorado, una oportunidad histórica para acceder a la intendencia y así reconstruir principios y conceptos que fueron norte en la administración del 83 al 89: "Ratificamos nuestra pertenencia a Cambiemos, pero tenemos nuestras diferencias. No soy el monaguillo levanta manos que dice que está todo bien. El gobierno nacional ha aplicado políticas que no son correctas y otras que no lo son, pero yo hago mi campaña como candidato a intendente con tres prioridades: Primero Rosario, segundo Rosario y tercero Rosario".