El ex titular de la AFI Oscar Parrilli recusó al juez Ariel Lijo por “enemistad manifiesta” a partir de las filtraciones de escuchas de conversaciones entre el ex funcionario y la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Y hoy le exigirá al titular de la Corte, Ricardo Lorenzetti, que inicie una investigación para determinar cómo se difundieron esas grabaciones. Pese a que el titular de la AFI, Gustavo Arribas, aseguró ante el Congreso que era grave la entrega de esas escuchas a medios de comunicación y que sería investigado, la difusión continúa sin mayores problemas: ayer un portal de noticias dio a conocer las supuestas transcripciones de nuevas escuchas a Parrilli y CFK.
Parrilli recusó al juez Lijo a partir de la primera oleada de difusión de escuchas, que fueron tomadas en una causa en la que se investiga al ex titular de la AFI por el presunto encubrimiento a Ibar Pérez Corradi. Para pedir la recusación, se basó en entrevistas en prensa gráfica y radial del juez y en la filtración de los audios. “Por una parte (el juez) llega a sugerir que el propio Parrilli carecería de autoridad para cuestionar lo que estima como persecución política, merced a ‘no haber cuestionado la legalidad de las escuchas’”, indicó en el pedido de recusación. “No compete al tribunal cuestionar o hacer valoraciones extramuros del expediente, acerca de las estrategias jurídicas que diagrame la defensa”, agregó Parrilli, a quien el fiscal Guillermo Marijuán le pidió la imputación a partir del contenido de las escuchas.
Parrilli destacó que Lijo habló de “hallazgos casuales” de las escuchas y sostuvo que, con la denuncia de Marijuán, constituirían “otros delitos”. “¿Acaso sabe algo el juez que aún no develó? Si Marijuán, fiscal de la causa desde el comienzo de la investigación, tenía disponible el fragmento que denuncia como constitutivo de delito desde mitad del año 2016, ¿cómo es posible que descubra siete meses después que hay delito en ese fragmento?”, inquirió. El juez Lijo le enviaría a su par Sebastián Casanello la copia de los CD con las escuchas para que evalúe si hay nuevos delitos por los que imputar a la ex presidenta y a Parrilli.
El ex funcionario kirchnerista tiene previsto reclamarle hoy “al presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (Ricardo Lorenzetti) que se inicien actuaciones sumariales tendientes a dilucidar los responsables administrativos de la filtración de las escuchas y que se apliquen las sanciones administrativas que correspondan”. “El tribunal, cabeza del Poder Judicial de la Nación, es el responsable del Departamento de Interceptación de Comunicaciones”, advirtió Parrilli, quien estimó que se puso en “riesgo la credibilidad del Poder Judicial de la Nación, y con ella, el último eslabón de protección de los derechos de las personas”.
Mientras tanto, siguen filtrando nuevos fragmentos de escuchas a medios de comunicación, en este caso, el portal de noticias Infobae, propiedad de Daniel Hadad. Entre las transcripciones que difundieron, la ex presidenta supuestamente habló de “terminar con este psicópata”, por el espía Horacio Stiuso, y criticó duramente al jefe del bloque del PJ en el Senado, Miguel Pichetto. En todos los casos, no parece advertirse ningún delito, sino más bien la difusión de conversaciones privadas de opositores al gobierno de Mauricio Macri con el fin de generar impacto.
Macri fue absuelto a días de comenzar su presidencia por su presunta participación en una asociación ilegal para realizar escuchas ilegales. Algunos de sus funcionarios deberán enfrentar un juicio oral en esa causa. Al llegar a la Presidencia, Macri ubicó al frente de la AFI a Gustavo Arribas, quien estos días se encuentra seriamente cuestionado por la transferencia de miles de dólares a una cuenta en Suiza por parte de un condenado en la principal causa de corrupción en Brasil.