El Tribunal Oral en lo Criminal N° 7 suspendió el juicio contra el cantante Gustavo Cordera por el plazo de un año y seis meses al aceptar la probation solicitada por el imputado. El juez Germán Castelli negó que Cordera esté en condiciones de dar charlas sobre lo que supuestamente aprendió sobre violencia de género, pero aceptó que realice dos recitales a beneficio de la querella, que tome un curso de capacitación sobre violencia de género y luego se retracte públicamente por sus dichos en el instituto TEA “para enviar un mensaje concreto a la comunidad a la que pertenece el colectivo de mujeres respecto de la intolerancia por parte del Estado a este tipo de conductas”. 

Cordera, acusado de “incitación a la violencia colectiva” por haber dicho que hay mujeres que “necesitan ser violadas para tener sexo”, deberá “reparar el daño” que le hizo al colectivo de mujeres con una serie de medidas dictadas por Castelli. El magistrado consideró que el proceso judicial en su contra podía suspenderse en caso de que se cumplieran las medidas dictadas porque “se logra un equilibrio entre los derechos de las víctimas, los del imputados y el interés de la sociedad”. 

El magistrado valoró que la audiencia del 19 de marzo haya sido difundida en vivo y que allí Cordera reconociera “la necesidad de deconstruir en su persona aquellos valores patriarcales culturalmente adquiridos, demostrando, a su vez, su voluntad de cumplir medidas reparatorias”. “Cometí un error y necesito repararlo”, había pedido el cantante en la audiencia donde se declaró arrepentido. 

Puntualmente, el juez ordenó al cantante seguir una serie de condiciones que no lleven sólo “a prevenir por su parte la comisión de conductas que puedan resultar constitutivas de violencia de género” sino también a generar conciencia y “reparar de algún modo el daño causado”. 

Cordera deberá abstenerse de hacer declaraciones públicas que “explícitamente promuevan, naturalicen o legitimen la violencia sexual contra las mujeres o que configuren violencia simbólica” y tendrá que realizar el curso de capacitación “Taller de Conversaciones sobre Género y Cultura” dictado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Ciudad de Buenos Aires. Concluidas las clases, y tal como había requerido el Ministerio Público Fiscal, tendrá que grabar una retractación y pedido de disculpas, en audiovideo, que se publicará en sus redes sociales, y aportar el video a la Justicia para que se agregue al expediente. 

El magistrado aceptó el ofrecimiento del imputado de dar dos conciertos para generar conciencia sobre la violencia de género. Uno de ellos deberá ser a beneficio de la Asociación Civil Red Vida y otro de las asociaciones o fundaciones que las autoridades del Instituto Nacional de las Mujeres estimen conveniente, cuyos costos de realización estarán a cargo de Cordera. En ellos deberá brindar un espacio de 15 minutos a algún miembro de esas organizaciones “para que pueda dar un mensaje al público que promueva la concientización de la problemática de género”. 

Las declaraciones del cantante se dieron en una charla organizada por la escuela de periodismo TEA Arte, en agosto de 2016, a la que Cordera acudió como invitado. “Hay mujeres que necesitan ser violadas para tener sexo porque son histéricas, psicológicamente lo necesitan porque tienen culpa y porque no quieren tener sexo libremente”, manifestó ante los estudiantes de periodismo. Un alumno grabó la declaración con su celular y la difundió a través de las redes , donde fue duramente cuestionado hasta llegar a la Justicia.


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