El grueso de la oposición parlamentaria buscará hoy sesionar en la Cámara de Diputados para tratar casi ochenta proyectos para paliar las consecuencias de la crisis económico-social desatada por el Gobierno nacional –en medio de una jornada de reclamos que encabezan las centrales sindicales y movimientos sociales– y cuyo debate el oficialismo bloquea en el Congreso. La sesión especial convocada por las tres bancadas peronistas (Frente para la Victoria, Argentina Federal y Frente Renovador), incluye la exención del impuesto a las Ganancias a las jubilaciones y las emergencias en materia alimentaria, tarifaria, por violencia de género y laboral en el ámbito de Fabricaciones Militares. Cambiemos, en tanto, esperará tras bambalinas y si los opositores logran el quórum para sesionar bajarán al recinto para frenar el tratamiento de los proyectos que requieren de una mayoría calificada y que la oposición no reúne.
La oposición confía en alcanzar el quórum para sesionar. A la convocatoria lanzada por el FpV-PJ, AF y el FR, se sumarán Red por Argentina –el interbloque que preside Felipe Solá–, los puntanos de Unidad Justicialista, del Frente de Izquierda, y varios monobloques. Con asistencia perfecta, los opositores superarían los 129 diputados necesarios para abrir el debate de las iniciativas que incomodan al Gobierno.
La exención del pago del impuesto a las Ganancias para jubilados y pensionados encabeza la nutrida agenda opositora. El proyecto está en sintonía con el pedido de la Corte Suprema al Poder Legislativo, tras el fallo a favor de la demanda de un jubilado y que abre las puertas a decena de miles de demandas similares.
La declaración de la emergencia alimentaria es otro de los puntos de la convocatoria opositora y busca satisfacer el reclamo de los movimientos sociales que atienden las necesidades elementales en las barriadas más vulnerables. Uno de los proyectos propone la declaración por un año y la posibilidad de prorrogarlo por seis meses más.
Los tarifazos también son parte del temario. Las iniciativas van desde la declaración de la emergencia tarifaria por un plazo de seis meses hasta dejar sin efecto los aumentos de gas, luz y agua desde el primero de enero de este año y también un proyecto que le otorga al Congreso el control de las audiencias públicas que ahora hacen los cuestionados entes reguladores.
En esa batería de proyectos también está la declaración de emergencia sobre violencia de género, el reclamo presupuestario para la prevención, la erradicación de la violencia contra las mujeres e incluso la licencia laboral a quienes padecen violencia de género y soluciones habitacionales. También hay un pedido de informe sobre la publicidad del Gobierno contra la violencia de género donde participaba el denunciado actor Juan Darthes.
La política oficial de desmantelamiento y cierre de las plantas que dependen de Fabricaciones Militares (FM) en distintas provincias, también forman parte del temario opositor. La emergencia por 24 meses en FM, la reincorporación de los despedidos de las plantas de Córdoba y los despedidos y la precaria situación de sus fábricas en Santa Fe y San Juan, expresan la preocupación de los diputados opositores.
Pero el oficialismo jugará todas sus fichas a frenarlos. En una reunión que se llevó a cabo ayer por la tarde-noche en la Cámara baja, Cambiemos trazó la estrategia para lograrlo en medio de un operativo especial para que su tropa esté hoy en Buenos Aires y la lleve adelante.
No se trata de una táctica sofisticada. Con el debate clausurado en comisiones (más allá de las iniciativas impuestas por la Casa Rosada), ninguno de los proyectos opositores tiene dictamen. Por lo tanto, se necesitan el respaldo de dos tercios de los presentes en el recinto para forzar su tratamiento. Con los diputados de Cambiemos sentados en sus bancas, el oficialismo garantiza que la oposición no alcance esa mayoría calificada. Aunque difícilmente, Cambiemos logre evitar que el recinto se convierta en un amplificador de los reclamos que hoy también se expresarán en las calles de todo el país.