El secretario general de Suteba, Roberto Baradel, advirtió que la cifra del 18 por ciento, en cuatro cuotas, que el gobierno bonaerense intenta fijar como aumento salarial para los docentes "es una cifra que tratan de imponer como techo" tanto el Ejecutivo provincial como el nacional. El dirigente gremial aseguró que rechazarán la oferta porque significa una pérdida del poder adquisitivo frente a la proyección inflacionaria del 25 por ciento más el 10 por ciento perdidos en la negociación de 2016.
Baradel sostuvo que pedirán un 35 por ciento de aumento y volvió a denunciar la eliminación de la paritaria nacional docente ya que "garantizaba un piso salarial" para todo el país, mientras que el Ejecutivo debía asumir el respaldo económico a las provincias que no podían cubrir los sueldos.
"Si intentan imponer el 18 por ciento como única posibilidad no es una paritaria, es una imposición", sostuvo Baradel e indicó: "pasaríamos de un gobierno democrático a uno autoritario". El titular de Suteba, en diálogo con AM750, adelantó que convocarán a toda la comunidad educativa para "defender la educación pública" y recordó que en el Presupuesto 2017, la gobernadora María Eugenia Vidal redujo el presupuesto para Educación del 28 por ciento al 25 del total, lo que significó un recorte de 16.550 millones de pesos.
En el mismo tono se expresó el secretario general de Ademys, Jorge Adaro, quien advirtió que la búsqueda del Gobierno nacional de "poner un tope del 18 por ciento a la discusión paritaria y, por otro lado, anular la discusión a la paritaria nacional" son dos elementos que "no permiten iniciar las clases". "Esto no es lo que esperamos porque buscamos la unificación salarial en todo el país", afirmó Adaro.
El jueves pasado, los gremios docentes —Suteba, Ctera, Sadop, CEA, Ademys y ATE Capital— se movilizaron contra la decisión del Gobierno nacional de suspender las paritarias nacionales y traspasar la responsabilidad del acuerdo salarial a las provincias. Denunciaron que la decisión violenta la Ley de Financiamiento Educativo.
"No convocar la paritaria nacional es dejarla librada a su suerte en cada provincia como en la década del '90, cuando varias provincias no pagaban los salarios y los chicos no tenían clases", advirtió Baradel. El titular de Suteba recordó que "algunos economistas, incluso de este gobierno, calificaban a las provincias como inviables" para resaltar la importancia de la paritaria nacional docente que "fija un piso salarial para que no haya disparidad y la provincia que no pueda pagar debe ser asistida por el Estado nacional".
La Ley de Financiamiento Educativo, sancionada en 2005, sostiene que el Ministerio de Educación nacional debe acordar junto al Consejo Federal de Cultura y Educación y las entidades gremiales docentes las condiciones laborales, el calendario educativo y el salario mínimo docente. También dispone un fondo de compensación para asistir financieramente a las provincias que por falta de recursos no lleguen a pagar el salario mínimo docente.