El socio del estudio del presidente de la Corte Suprema, Carlos Rosenkrantz, confirmó ayer, de hecho, que la banda que integró Marcelo D’Alessio hizo espionaje sobre miembros del máximo tribunal. Gabriel Bouzat declaró ante el juez Alejo Ramos Padilla y le exhibieron un listado de sus viajes al exterior, nómina que el juez de Dolores encontró en el allanamiento a la casa del falso abogado. Bouzat confirmó que la lista es verosímil: tiene que chequear los datos con su pasaporte, pero figuran destinos como Panamá, Paraguay, Dubai, Londres, Alemania y muchos otros a los que el socio de Rosenkrantz viajó.
La declaración de Bouzat agrava notoriamente la causa judicial radicada en Dolores. El magistrado convocó al socio del estudio de Rosenkrantz porque no sólo hay informes sobre los dos miembros de la Corte sino también de ese socio del estudio. Pero, además, ya no se trata de que D’Alessio le comentó al espía Hugo Rolando Barreiro, como al pasar, y mirando su computadora, que “(Horacio) Rosatti y (Carlos) Rosenkrantz no van a poder explicar cómo viajaron tanto a Panamá y Miami”. A Bouzat le exhibieron un listado concreto, encontrado en el allanamiento, y los datos se corresponden con la realidad.
La nómina estaba en un legajo con el nombre de STN, Security Team Network (STN). Googleando ese nombre aparece una empresa que se presenta de la siguiente manera: “Security Team Network S.A es una empresa fundada en 2009 por ciudadanos israelíes residentes en Argentina, con el propósito de distribuir productos de alta tecnología en seguridad desarrollados y fabricados en Israel”. En la página de Internet de STN figura un domicilio en la calle Corrientes al 1100. Habrá que ver si esta ligazón es real y en ese caso no queda claro para quién hacía D’Alessio todo este espionaje.
Hasta ahora se sabía que el proveedor de la banda de esos informes de Migraciones fue el suspendido fiscal de Mercedes Juan Ignacio Bidone. Hay que ver si estos datos también los consiguió él y en ese caso con qué argumento porque es gravísimo que Migraciones informe sobre los viajes de dos miembros de la Corte sin que medie una fuerte razón judicial.
Bouzat declaró: “He estado en los lugares que surgen de ese documento, así es que he estado en los Estados Unidos, Perú, Chile, Italia, Brasil, Gran Bretaña, Uruguay, Alemania y otros lugares que figuran. Sí recuerdo que en el 2015 fui a Cuba, vía Panamá, a la Bienal de Arte y en el 2016 fui invitado por la Escuela de Yale a Cuba e hice tránsito por el aeropuerto de Panamá”. Es decir que el listado es real y no uno de los tantos inventos de D’Alessio, con membretes truchos.
Todo indica que si es verdad el espionaje a Bouzat probablemente lo sea también el de Rosenkrantz y Rosatti. Se había dicho que la lista podía ser trucha porque Rosatti no viajó al exterior desde 2006, pero fuentes allegadas al ministro de la Corte aclararon que no es así. Rosatti no estuvo en Miami desde entonces, pero sí viajó a México a un congreso de derecho. También a Barcelona y numerosas veces a Uruguay, entre otros viajes al exterior.
Según voceros de la Corte Suprema, por ahora no está en estudio presentarse como querellantes en Dolores, pero porque hasta el momento no llegó nada formal al máximo tribunal. Se ve que Ramos Padilla quiere moverse con mucho cuidado en algo tan delicado. Primero citó a Bouzat y es muy probable que ahora que confirmó la veracidad del listado le advierta a Rosenkrantz y a Rosatti del espionaje concretado por esta asociación ilícita.