La expresidenta Cristina Kirchner mostró a través de las redes sociales el trámite de registro de huellas dactilares realizado en Río Gallegos, luego de que el juez federal Claudio Bonadio la obligara a viajar a Buenos Aires para cumplir ese requisito y que esas huellas no hayan quedado grabadas correctamente.
“¿Por qué Bonadio hizo todo lo que hizo? Para lograr la foto ingresando a Tribunales”, afirmó Cristina y dijo que “este es un gobierno de fotos”. Enumeró las “fotos de colectivos falsos, fotos de timbreos que no existen”, en las que fueron descubiertos el presidente Mauricio Macri y sus funcionarios.
CFK recordó que ahora Bonadio citó a declaración indagatoria a sus hijos para el 6 de marzo, “para que el 7 de marzo veas en la tapa de Clarín a Máximo y Florencia entrando en Tribunales”, afirmó. El 7 de marzo la citada fue la propia expresidenta, justo en la fecha en que la CGT hará su movilización contra las políticas de Macri.
“Es una mezcla de persecución feroz con objetivos de proscripción, que tiene por objetivo también tapar todo lo que está pasando”, denunció la exmandataria y enumeró la desocupación, la falta de trabajo y las empresas que cierran. “El propio Clarín echa a todos sus empleados del taller y hoy tiene el taller tomado”, añadió al referirse al conflicto de AGR.
La expresidenta reiteró que se trata de “un entramado mediático, judicial y de servicios de inteligencia” usado para “tapar la realidad, perseguir y hacer control social”.
“A todo esto de las foto ahora le han agregado un condimento nuevo: las escuchas”, continuó Cristina en el video publicado en sus redes y aclaró que eso “en realidad no es nuevo” porque “ya lo conocimos con Macri en la Ciudad donde armó un sistema para escuchar gente”.
Tras denunciar que estamos en una Argentina “de control social, de intimidación” y ante una “verdadera decadencia democrática”, CFK concluyó: “El país que prometieron no es el que estamos viviendo”.