Los economistas del mercado se muestran cada vez más pesimistas con la estrategia macroeconómica aplicada en los últimos meses. Esta semana hubo una serie de seminarios financieros en los que expusieron varios consultores de la city. Hubo coincidencia en el diagnóstico: la situación “está fuera de control”. La inflación y el dólar son las principales amenazas para los próximos meses. Desde la postura de estos especialistas, el planteo es que el Gobierno hace menos ajuste del que debe y que la salida es mayor recorte fiscal. Este enfoque conservador de la política fiscal (y monetaria) no fue efectivo para enfrentar crisis locales, recomponer la confianza y reactivar el mercado interno.

Diego Giacomini fue uno de los  más críticos. “Si analizamos dos años, es decir el punta a punta de 2018 y 2019, la inflación puede ser 140 por ciento o incluso superior”. El consultor aseguró que “no se puede bajar la inflación con un Banco Central que no tiene reputación ni credibilidad, mientras hay un repudio por el peso y un desplome de la demanda de dinero”.

Guillermo Nielsen es otro de los que se mostró en estado de alerta por la situación de la macroeconomía. “El país está perdido en una crisis y con una moneda agonizante casi en los últimos estertores”, mencionó el ex secretario de Finanzas de la gestión de Roberto Lavagna. Planteó que “el país lleva diez años sin crecer y las perspectivas de corto y mediano son totalmente desalentadoras, porque es inviable con esta presión impositiva y este nivel de deuda respecto del Producto Interno Bruto”.

La propuesta de Giacomini fue modificar la estructura tributaria bajando la presión impositiva en 10 puntos del PIB entre 2020 y 2023. Pero la disminución en la recaudación no vendría sola. El economista aseguró que es necesario también recortar el gasto público en 15 puntos del PIB. “El gasto público baja más que la presión tributaria, ya que estamos yendo derecho a un default y, para evitarlo, vamos a necesitar un superávit fiscal primario de 3 puntos del PBI”, explicó Giacomini. Esto es equivalente a decir que el ajuste actual no es suficiente y que se necesita un mayor recorte del presupuesto para poner la economía en orden. 

 Las políticas de ajuste del Gobierno, que busca en 2019 alcanzar el déficit cero, no fueron efectivas en los últimos meses para contener la inflación ni la presión cambiaria. Pero los consultores, en lugar de buscar alternativas heterodoxas para recomponer el mercado interno, plantean que la solución es reforzar el ajuste. Giacomini aseguró que se debe bajar el gasto público en obras de infraestructura, transferencias y subsidios. Esto equivaldría a menor empleo público y nuevos aumentos en los servicios públicos, lo cual no fue mencionado por el expositor ni su impacto sobre el poder de compra de la población. Aunque la postura se presenta como hípercrítica de las políticas del gobierno, en los hechos se resume en proponer medidas con idéntica orientación pero en forma más abrupta y cruenta. 

En el seminario convocado por la Universidad de Belgrano, también expuso Javier Milei, socio de Giacomini en la consultora Economía & Regiones, caracterizada por sus propuestas ultramonetaristas. Se focalizó en promover el despido de empleados estatales, recorte de beneficios sociales como la AUH y avanzar en una reforma previsional que reduzca la carga pública en políticas sociales.