No soportó ser detenido. El ex presidente Alan García se disparó cuando las autoridades ingresaron a su casa para detenerlo por cargos de corrupción. La orden de captura se dispuso en el marco de las investigaciones judiciales ligadas a la trama de corrupción vinculada a la constructora brasileña Odebrecht. Se trataba de una detención preliminar por diez días, luego de la cual la fiscalía podía solicitar su detención preventiva hasta por tres años mientras se desarrolla el proceso.
Cuando la policía ingresó con una orden judicial para detenerlo, el ex mandatario fue a su habitación y se disparó. Inmediatamente, poco antes de las seis de la mañana, hora local, García fue trasladado de emergencia a un centro médico, con una herida de bala en el cráneo con entrada y salida. En el momento del envío de esta nota estaba siendo operado. Tuvo tres paros cardiacos, de los cuales pudo ser recuperado. La ministra de Salud informó que la situación del ex presidente era “muy delicada”.
La detención preliminar contra García se ordenó por el supuesto cobro de sobornos a Odebrecht durante su segundo gobierno, entre 2001 y 2006. En los últimos días se conoció que el secretario de García cuando éste era presidente, Luis Nava, habría recibido 4,5 millones de dólares de Odebrecht. La fiscalía investiga a García como el posible receptor final de esos sobornos, que habrían sido recibidos por Nava como testaferro. Documentos de la empresa también han revelado que García recibió 100 mil dólares pagados en forma oculta por Odebrecht y justificados como retribución a una conferencia del ex presidente. Así mismo, se investiga el supuesto financiamiento ilegal de la constructora a su campaña electoral.
En noviembre pasado, García, que tenía orden de impedimento de salida del país, intentó eludir las investigaciones judiciales pidiendo asilo en la embajada de Uruguay, el cual le fue negado. La orden de detención e intento de suicidio de García se dan el mismo día que un tribunal debe decidir la prisión preventiva por tres años del también ex presidente Pedro Pablo Kuczynski, ahora con detención preliminar, acusado, como García, por actos de corrupción relacionados con Odebrecht.