A fines de mayo, Rosario reunirá por primera vez a más de 500 mujeres de 36 naciones indígenas en lo que será el Segundo Parlamento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir. Durante tres jornadas, debatirán sobre temas estructurales que van desde la determinación de la tierra y el cuerpo, la economía, los "feminicidios" en las comunidades, la educación y formación en prácticas ancestrales. "Es un hecho histórico para Rosario. Estamos honrando a la ciudad con nuestra presencia. Las guardianas, las luchadoras, las que defendemos los territorios", definió Moira Millán, referente mapuche, sobre las colectivas que llegarán.
El encuentro que se hizo por primera vez el año pasado en la ciudad bonaerense de Ensenada (de donde se gestó el pedido para que el Encuentro Nacional de Mujeres sea plurinacional), reunirá por segunda vez al movimiento, en Rosario, entre el 24 y el 26 de mayo. "Se darán debates, talleres y encuentros con el fin de definir una agenda de acción para visibilizar la realidad de las mujeres originarias, demandar y gestionar derechos, como así también fortalecer la organización en unidad y consenso para salvaguardar la vida de los territorios", puntualizaron.
En conferencia de prensa, Millán señaló ayer que "las mujeres vendrán a parlamentar no solamente sobre la realidad de nuestro pueblos, sino de temas como la propuesta de una pluriversidad de mujeres indígenas, que va a ser la primera universidad para mujeres indígenas en el país, donde solo se impartirán conocimientos ancestrales y que abrirá sus puertas a todas. Eso será posible gracias a la donación de siete hectáreas que hizo parte de mi comunidad". Además, enumeró: "Vamos a hablar sobre comercio justo, cómo articular una economía solidaria entre las mujeres; sobre la problemática del extractivismo en nuestros territorios, el acceso a la tierra", repasó sobre la agenda que las espera.
También puntualizó: "Nos preocupa muchísimo el feminicidio indígena, por lo que vamos a hacer un relevamiento de casos, a lo largo de todo el país. La diferencia entre feminicidio y femicidio es que el primero es el crimen de las empresas transnacionales, extractivistas sobre el cuerpo de las mujeres: nos están asesinando empresas. Si bien hubo toda una campaña para reclamar medidas más firmes, punitivas y de escraches contra violadores, asesinos, criminales, misóginos contra nosotras y nuestros cuerpos, también hay una complicidad articulada entre las empresas extractivistas transnacionales y el Estado; y eso no cobró visibilidad", dijo.
Visibilizar la realidad de las mujeres originarias, demandar derechos, fortalecer la organización y salvaguardar la vida de los territorios.
La coordinadora de la comunidad mapuche en Chubut agregó que el movimiento de mujeres indígenas busca "fortalecer las perspectivas en cuanto a la construcción de la plurinacionalidad de los territorios. Vamos a trabajar hasta conseguir la libre determinación de nuestros pueblos. Ese será el desafío. Entendemos que en Rosario hay una población enorme de hermanas y hermanos que están absolutamente marginados y despojados de todo derecho. Queremos que las presencias que habrá aquí fortalezcan la lucha. Somos el sector poblacional más pobre en los territorios más ricos y vamos a necesitar mucho acompañamiento", dijo Millán.
En la previa, sumó que tienen varias reuniones: "Queremos juntarnos también con la intendenta Mónica Fein para que sepa qué dimensión tiene este encuentro. Que vangamos tan generosamente a decir cómo podemos cambiar la situación actual y hacer nacer una nuevo país es todo un acto de amorosidad", aseguró. "Somos las mujeres originarias las que logramos el consenso y no los varones. Creo que es la única organización con nivel de horizontalidad y de participación de todas las naciones consensuando agendas".
Entre las problemáticas destacó "el extractivismo, la militarización de los territorios, el latifundio. Preocupa que el Estado argentino esté siendo tan laxo en el control de las armas".
Al mismo tiempo, lamentó: "En lo general, no tenemos acceso a la Justicia, porque contrario a lo que dijo (el presidente Mauricio) Macri, el castellano no es hablado en todos los territorios. En los edificios públicos no hay nomenclatura bilingüe, no hay traductores en los tribunales ni en ningún lado. Hay un desprecio hacia los derechos de nuestros pueblos", aseguró.
Otro desafío que tienen son los derechos laborales: "Necesitamos un sindicalismo plurinacional que reconozca derechos mínimos para que nuestras ceremonias sean reconocidas como las del cristianismo, el pueblo judío o el musulmán".
Noelia Naporichi, de la comunidad Qom de zona oeste, relató que llegó desde Río Bermejito, Chaco, hace siete años. Comenzó a militar a los 13 en le Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir. Hoy tiene 24 años y es parte de la organización del encuentro. "Queremos alcanzar a todas las mujeres indígenas. Sabemos que les cuesta llegar a nosotras. Creemos que nuestras voces son capaces de levantar la fuerza de las mujeres, cuando el patriarcado está tan arraigado".