El Secretario de Transporte porteño, Juan José Méndez, fue demandado penalmente por la muerte de Ramiro Cayola Camacho, el joven de 20 años que, el 12 de abril, circulaba en bicicleta por Puerto Madero mientras trabajaba para la empresa de repartos Rappi, fue atropellado por un camión y murió. “Esta tragedia era evitable si el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires no hubiera omitido sus deberes” y la calle, interrumpida por una obra del Gobierno, hubiera estado correctamente señalizada, indica la denuncia presentada por Gabriela Carpineti y Juan Grabois. El escrito sostiene que el Secretario Méndez es responsable de “estrago culposo seguido de muerte” e “incumplimiento de los deberes de funcionario público”.
El viernes 12 de abril, alrededor de las 19, Cayola Camacho transitaba en bicicleta “mientras trabajaba para la empresa de economía de plataforma Rappi”, reconstruye la denuncia. Circulaba por avenida Eduardo Madero entre San Martín y avenida Córdoba, en donde una obra del Gobierno porteño, con “mala señalización” llevó a la reducción de la calzada. Eso “derivó en un accidente que se cobró la vida” del joven, que “se desempeñaba como trabajador precarizado de la empresa de pedidos Rappi”. Por “un desvío en la calle que estaba mal señalizada, fue arrollado por un camión” cuyo conductor fue detenido por policías de la Comisaría 1, que también secuestró el vehículo. El episodio fue caratulado como “homicidio” en la causa que tramita en el Juzgado Criminal y Correccional 37.
La denuncia de Carpineti y Grabois contra Méndez asevera que el siniestro a causa del cual murió el joven Cayola Camacho se produjo “principalmente a causa de la nula señalización a cargo del GCABA, que hay en la obra vial que se está realizando en la intersección de las avenidas Madero y Córdoba”. A esa “carente señalización respecto de la reducción de calzada”, advierten, se suma “la inexistencia de personal de tránsito en el lugar y la mala colocación de los conos y obradores refractarios en una arteria que se transita a tan alta velocidad”, todos elementos que “provocaron el accidente”. En el episodio, “la bicicleta queda encerrada entre la calzada reducida y el acoplado del camión”, de modo que “la mecánica del golpe es lateral”. “Esta tragedia era evitable si el GCABA no hubiera omitido sus deberes”.
Para hacer hincapié en la responsabilidad del Secretario Méndez en el accidente, la denuncia refiere también la causa a partir de la cual el Juzgado Nº2 Contencioso, Administrativo y Tributario porteño ordenó al Gobierno de la Ciudad que prohibiera la actividad de las plataformas de envíos hasta tanto se garantizaran las condiciones de seguridad adecuadas para sus trabajadores. A esa medida dictada por el juez Andrés Gallardo le había antecedido en diciembre de 2018 una resolución que dictó “medidas que tuvieron en mira fundamentalmente el grave riesgo a la seguridad en la via pública y la afección a la integridad de los conductores de bicicleta que prestan servicio de reparto a domicilio como consecuencia del incumplimiento de las normas del Código de Tránsito y Transporte vigentes”, pero que nunca fueron cumplidas.
“Esto no es más que una muestra clara de que la desidia y la inacción del estado se cobra una vez más la vida de un trabajador humilde cuyo único objetivo era llevar un plato de comida a su casa y que, de haber escuchado las advertencias de las organizaciones sindicales, las cámaras empresarias y, fundamentalmente si se hubiese cumplido con lo dictaminado por la justicia, esto no habría sucedido”, indican Carpineti y Grabois en la denuncia.
El escrito señala, además, que tras el arrollamiento, “hubo testigos que encontraron al lado del cuerpo sin vida de Ramiro Cayola Camacho, el celular con la aplicacion activa de Rappi recibiendo pedidos”, algo que “demuestra, junto con la tarjeta identificadora, que se encontraba cumpliendo funciones para la empresa”.